Bankia cerró ayer la integración de las plataformas tecnológicas tras su fusión con BMN, un proceso que ha culminado este fin de semana, apenas dos meses y medio después de que la operación obtuviese todas las autorizaciones. En una nota, la entidad recuerda que, tras integrar 613 oficinas en todo el territorio nacional, los clientes ya pueden operar a partir de hoy en más de 2.250 oficinas y más de 6.400 cajeros automáticos.

En este proceso de integración, Bankia ha actualizado más de 22.000 dispositivos utilizados en las oficinas. Además, se han intercambiado más de 67.000 ficheros y unos 30 terabytes (Tb) de datos que corresponden a más de nueve millones de contratos de 1,7 millones de clientes.

Los 8,2 millones de usuarios de la entidad no tendrán que realizar ningún trámite, explica Bankia, que añade que, aunque se modifica el número de cuenta del cliente (código IBAN), las domiciliaciones de recibos cambiarán automáticamente y se abonarán en la nueva cuenta de Bankia.

Las tarjetas emitidas por BMN en propiedad de los clientes funcionarán con normalidad tanto en comercios como en cajeros automáticos, si bien serán sustituidas por las nuevas tarjetas Bankia.