La economía de la Comunitat Valenciana podría experimentar una contracción del 2,2 por ciento en 2012, tras cerrar 2011 con un crecimiento del 0,6 por ciento, a consecuencia fundamentalmente de su elevado endeudamiento, tasa de desempleo, exceso de oferta en vivienda, apalancamiento en el sector privado, pérdida de peso de las exportaciones y su Producto Interior Bruto (PIB) per cápita relativo, según la estimación realizada por el servicio de estudios de BBVA.

Así lo recoge el primer estudio 'Situación Comunitat Valenciana' presentado este lunes por el director de la Territorial Este de BBVA, Javier Pérez Cardete, y el economista jefe de Economías Desarrolladas de BBVA Research, Rafael Doménech, quien ha subrayado que la autonomía tiene mejor posicionamiento a largo que a corto plazo y ha reconocido que el sector público "es un lastre que marginalmente es un poco peor" que el resto de elementos negativos de la autonomía.

De acuerdo con ese informe, los "desequilibrios" que presenta la Comunitat la sitúan a corto plazo a la cola a nivel estatal en cuanto a posicionamiento para superar la crisis y la obligan a realizar mayores esfuerzo de ajuste. Doménech ha resaltado que deberá acometer una consolidación fiscal "rigurosa" y "gradual" y que, para que su apuesta "sea totalmente creíble", debería presentar un programa muy detallado de reformas con "objetivos claros" para los próximos años.

A largo plazo, remonta cinco puestos y se enfrenta al reto de mejorar el capital humano, el tecnológico y el entorno regulatorio, como bases del crecimiento económico, en un momento en el que debe afrontar esos procesos de desapalancamiento y consolidación fiscal.

BBVA Research considera "cruciales" las reformas estructurales para que la Comunitat "recupere la senda de crecimiento sostenido del empleo" y realice una rápida reasignación de factores productivos hacia los sectores y empresas más competitivas, con mayor dinamismo, potencial de crecimiento y capacidad de generar empleo.

Así, aboga por mejoras de competitividad que permitan aumentar la cuota de las empresas españolas en la demanda interior y reducir las importaciones un 10 por ciento, lo que supondría un aumento del PIB del 2 por ciento. En ese sentido, marca como objetivos prioritarios "generalizar" el comportamiento de los "buenos ejemplos de excelencia empresarial a nivel internacional", liberar potencial de crecimiento, incentivar la inversión extranjera directa y eliminar las "barreras que impiden una reasignación y un empleo eficiente de recursos".

Según el Servicio de Estudios de BBVA, el cambio en el sistema de financiación supone una mejora en términos absolutos respecto al sistema anterior pero no compensa la caída de ingresos que se ha producido como consecuencia de la crisis, mientras que la necesidad de consolidación y de devolución de los anticipos de caja de 2009 supondrán un lastre adicional durante los próximos años. REFORMA LABORAL "SUSTANTIVA, MUY BIEN ORIENTADA E INTEGRAL"

En cuanto a la tasa de paro, el informe señala que su sensibilidad al ciclo económico es mayor en la Comunitat que en el conjunto de España, con lo que se acelera más rápidamente en los momentos de crisis y profundiza la caída de la actividad. Al respecto, Doménech ha indicado que la reforma laboral "sustantiva, muy bien orientada e integral" recientemente aprobada debería disminuir esa sensibilidad al permitir mayor flexibilidad interna en las empresas, aunque subraya que su reto a corto plazo es evitar la destrucción de empleo.

Preguntados por el clima empresarial que perciben en la Comunitat y la actividad crediticia en este ámbito, Pérez Cardete ha señalado que la autonomía está "sufriendo empresarialmente" y que la entidad es líder en segmentos de mayor tamaño pero pretende ganar cuota de mercado en pymes, autónomos y profesionales. Así, aspira a "ocupar el liderazgo que dejan" entidades con menos "solvencia y liquidez" que BBVA y asegura querer dar "muchos más créditos" a la "demanda solvente" que en la actualidad está "insatisfecha". "EL CREDITO VA A DISMINUIR" DURANTE "ALGUN TIEMPO"

No obstante, augura que pese a la reestructuración y normalización del sector financiero, en España "el crédito va a disminuir" durante "algún tiempo" porque la economía española "parte de niveles de endeudamiento tanto familiar como empresarial excesivamente elevados". En cualquier caso, el directivo de BBVA ha subrayado que "lo importante es que haya crédito suficiente" para atender a las empresas y familias que poseen "niveles de crédito bajos".

Ambos han presentado ese estudio previamente al conseller de Economía, Industria y Comercio, Máximo Buch, y lo darán a conocer a destacados empresarios dela Comunitat este mismo lunes.