La firma australiana Billabong aceptó la oferta de compra de la estadounidense Boardriders, propietaria de su principal competidor, Quiksilver, por 380 millones de dólares locales (unos 248 millones de euros). La operación supone una revolución en el mundo del surf y el monopatín, donde ambas compañías sostenían una reñida competencia.

El acuerdo prevé que Boardriders ofrezca un dólar australiano por acción de Billabong, un 28% por encima de los 78 centavos que valía el 30 de noviembre, el día antes de la presentación de la oferta, según la cadena ABC.

De la oferta de compra quedan al margen el 19% de las acciones propiedad del fondo de inversión estadounidense Oaktree Capital Management. Billabong, marca de referencia de ropa y material deportivo de surf, registró el año pasado unas pérdidas de 77,1 millones de dólares locales (50,3 millones de euros), más del triple que en el ejercicio anterior.

La dirección de Billabong espera que en abril se haya podido finalizar el acuerdo de venta para el que será necesario la aprobación de los accionistas.