La Comisión Europea ha propuesto este miércoles a los países de la Unión Europea crear un Fondo Monetario Europeo (FME) a mediados del 2019, dentro del marco de una amplia reforma de la zona euro que incluye la nueva figura de un superministro europeo de Economía y Finanzas a partir de noviembre del 2019. Este superministro debería acumular las funciones del comisario europeo de Economía y del presidente del Eurogrupo, con rango de vicepresidente permanente de la Comisión Europea, que actuará como un alto representante de la UE en foros internacionales.

Estas propuestas de reforma han sido presentadas este miércoles en Bruselas por el vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, y los comisarios Günther Oettinger y Pierre Moscovici. Las reformas presentadas incluyen la introducción de una línea presupuestaria para la zona euro, así como la obligación de incorpar en los ordenamientos jurídicos nacionales las reglas de déficit y deuda del Pacto de Estabilidad y Crecimiento. También se proyectan incentivos para países de la UE que, como Bulgaria o Croacia, decidan sumarse al euro en el futuro.

Estas propuestas, destinadas tanto a la UE como a la Unión Económica y Monetaria (UEM), habían sido adelantadas en septiembre por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker. Tras su presentación formal este miércoles, las propuestas de reforma serán discutidas por primera vez por los jefes de Estado y de Gobierno durante una cumbre especial el 15 de diciembre que también se centrará sobre el 'brexit'. El objetivo es que la UE adopte decisiones sobre estas propuestas de la CE en la cumbre del próximo mes de junio.

CONTROL DEL PARLAMENTO EUROPEO

Según el vicepresidente Dombrovskis, todas estas medidas buscan "ayudar a responder a las crisis del futuro con una mayor visión democrática". "Se trata de prevenir futuras crisis, de estar preparados", ha remachado el comisario alemán Oettinger; y todo ello, aprovechando la "oportunidad" que brinda la actual bonanza económica de la zona euro para acometer reformas, según Moscovici.

En concreto, la Comisión Europea plantea "transformar el actual Mecanismo Europeo de Estabilidad (MES), órgano intergubernamental de gestión de la crisis, creado por los 19 estados miembros de la zona euro, en un Fondo Monetario Europeo", ha explicado el comisario Moscovici.

Financiado por los estados miembros, este FME podría también ejercer un papel de garantía para los bancos de la zona euro en dificultades en el supuesto de que las medidas ya previstas dentro del sistema de la Unión Bancaria no fueran suficientes. Moscovici ha explicado que el objetivo es que el FME funcione como un "órgano comunitario", rindiendo cuentas de su actuación "ante el Parlamento Europeo".

En la actualidad, el MES, dirigido por un consejo de gobernadores compuesto por ministros de Finanzas de la zona euro, es un organismo intergubernamental. La transformación del nuevo organismo en un "comunitario" es un cambio que inquieta a países como Alemania, por el temor de pérdida de influencia en un mecanismo del que son el principal aportador de fondos.