El ministro de Finanzas de Portugal, el socialista Mario Centeno, ha recibido la presidencia del Eurogrupo del holandés Jeroen Dijsselbloem, en el cargo desde el 2013, en una breve ceremonia celebrada en la Embajada de Portugal en París. "Agradezco (a Dijsselbloem) el gran trabajo y los compromisos logrados en los últimos cinco años, pero el trabajo todavía no está completo", ha declarado un sonriente Centeno después de que su antecesor le diese una pequeña campana como símbolo de la entrega de poderes.

El ministro portugués, uno de los rostros de la recuperación económica lusa para la que promovió medidas antiausteridad como el aumento del salario mínimo o de las pensiones, ha citado como desafíos de la zona euro la unión bancaria, la unión de los mercados de capitales y una política fiscal más homogénea.

Expectativas de los ciudadanos

Centeno, de 51 años, se dice "profundamente motivado" para ocupar el cargo que coordina a todos los ministros de Finanzas de la zona euro y aseveró que el organismo tiene que estar a la altura de las "expectativas de los ciudadanos". El breve acto se ha celebrado en la capital francesa y no en Bruselas, donde las instituciones comunitarias tienen su sede, debido a que Centeno visita oficialmente Francia en el momento en el que vencía el mandato de Dijsselbloem.

El político holandés, de 51 años, se ha reconocido "feliz" por entregar el cargo a Centeno, al quien deseó que continúe con la labor de reformas en la UE. Dijsselbloem, que en 2013 llenó el hueco de su predecesor, Jean-Claude Juncker, primer presidente del Eurogrupo entre 2004 y 2013 y hoy responsable de la Comisión Europea (CE), tuvo que lidiar en su mandato con espinosos asuntos como el rescate a Chipre y la renegociación del rescate a Grecia.