Oferta física y digital con cliente omnicanal y entrega de pedidos en menos de dos horas. La estrategia de El Corte Inglés está bien dibujada y pasa por replicar en su oferta en internet, en la que actualmente tiene unas 200.000 referencias, lo mismo que tiene en su red de establecimientos físicos.

El presidente del grupo, Dimas Gimeno, explicó ayer en Barcelona la estrategia de la compañía, que reclama unión entre pequeño y gran comercio para reclamar igualdad en las reglas de juego con respecto a grandes operadores como Amazon. Se trata, añadió, de que haya «reglas homogéneas» que permitan a todos los operadores competir «en igualdad de condiciones» y un marco normativo europeo que corrija las diferencias fiscales entre el comercio y los grandes operadores en línea. Gimeno defendió adaptar la normativa de comercio a la realidad del siglo XXI. A su vez insistió en que los nuevos operadores «tienen muchas ventajas» que se lo ponen «difícil» a los comercios tradicionales, pese a que en España estos nuevos agentes no llegan a una cuota de mercado del 5%. Con todo, aseguró que esto va a cambiar en los próximos tres años.

Tras admitir que se trata de un tema legal complejo y que la Administración está concienciada, insistió en sus reivindicaciones. «Lo que no puede ser es que nosotros paguemos impuestos cuando ellos no los pagan o que no se tenga en cuenta la cantidad de riqueza que generamos en un país», sentenció Gimeno, que apostó por una «competencia equilibrada».