Este jueves será un día histórico para los consumidores europeos. Once años después de que la Comisión Europea aplicase las primeras medidas para limitar el sobrecoste del uso del móvil en el extranjero (roaming), el 15 de junio los ciudadanos podrán, ahora sí, usar su móvil sin preocupaciones en otros países de la Unión Europea. Pero lo que a priori parece una buena noticia para los consumidores puede no serlo tanto: las operadoras estudian la posible subida de tarifas para compensar la pérdida de ingresos.

La lucha de la Unión Europea por eliminar el coste del roaming (itinerancia) ha sido constante durante la última década. El camino elegido por la entonces comisaria de Competencia, Viviane Reding,y continuado por su sucesora, Neelie Kroes, y finalmente por Andrus Ansip (Agenda Digital), fue limitar y reducir año a año el sobrecoste que las empresas podían aplicar en el caso del uso del teléfono en otros países miembros. Ahora, finalmente, desaparecerán por completo estos incrementos.

PAÍSES INCLUIDOS EN LA MEDIDA

Las nuevas reglas de juego afectan a los consumidores con tarifas de móviles contratadas en cualquiera de los 28 países miembros de la Unión Europea. Todos ellos podrán usar su móvil con la misma tarifa que tengan contratada también cuando visiten cualquiera de esos 28 países: Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chequia, Chipre, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, Rumanía y Suecia. Así, si el consumidor tiene contratados 200 minutos y 2 GB de datos, cuando viaje por esos países no habrá sobrecoste, sino que se descontarán de esa tarifa hasta que la agoten.

Además de esos 28 países, los tres principales operadores en España (Movistar, Vodafone y Orange) también extienden a Noruega, Islandia y Liechtenstein esa itinerancia sin sobrecoste. Vodafone, además, suma otros cuatro países a esa gratuidad Albania, EEUU, Suiza y Turquía.

CONTRATO Y PREPAGO

Así, en el caso de un consumidor de contrato no hay dudas: los límites de la tarifa contratada son los que se aplican en el extranjero. En el caso del prepago, hay algunas diferencias. Para las llamadas y SMS los pagará lo mismo que en su país de origen. En el caso de los datos, si paga por GB consumida y el precio unitario de los datos es inferior a 7,7 euros / GB, el operador podrá aplicar un volumen máximo de datos. Se debe llamar al operador para saber cómo afecta la normativa a cada tarifa.

Este nuevo escenario, eso sí, tiene letra pequeña. Los operadores se han garantizado un mecanismo para evitar un ciudadano contrate una tarifa en el país donde sea más barato y la use todo el año fuera de su origen. Si el operador detecta fraude (uso excesivo fuera del país de origen), podrá comunicarselo al cliente, que tendrá 14 días para defender su consumo antes de que se le aplique un recargo.

SUBIDA DE TARIFAS

Lo que es bueno a corto plazo para los consumidores, sin embargo, puede convertirse en un problema a medio plazo. Y es que los operadores van a tener que renunciar a un mercado de entre 4.000 y 4.500 millones de euros anuales, según fuentes del mercado. O lo que es lo mismo: reducción de los ingresos que estudian compensar con subidas de tarifas. Algo que, relacionado o no, ya ha sucedido en los últimos meses en el caso de los paquetes que incluyen internet en el hogar y móvil, también llamados convergentes.

LAS PREGUNTAS

¿Cómo se activa el fin del 'roaming'?

La Comisión Europea ha buscado que la aplicación del fin del roaming sea lo más sencilla posible. Y, de hecho, lo es tanto que los clientes no tendrán que hacer nada: las operadoras están obligadas a aplicarlo. Eso sí: los clientes de prepago deben llamar a su empresa para saber cómo afecta a su tarifa.

¿Se aplica en todos los países?

El fin del sobrecoste por usar el móvil en el extranjero afecta solo a los viajes entre los 28 países miembros de la Unión Europea. En el caso de los tres principales operadores, también se suman a la lista Noruega, Islandia y Liechtenstein. Sin embargo, usar el móvil en países como Andorra seguirá teniendo sobrecoste.

¿Podré usar WhatsApp?

El fin del sobrecoste de la itinerancia significa que el usuario podrá usar su móvil con las mismas condiciones que tenga contratadas en el país de origen. Si tiene una tarifa de datos, podrá usar internet (WhatsApp, Facebook, navegar) sin sobrecoste hasta que alcance el límite de datos mensual habitual.

Así, de ser casi prohibitivo usar el móvil en otros países se pasó a pagar un precio relativamenteasequible. Se marcó un máximo (0,49 euros el minuto de llamada en el 2007), y año a año fue abaratándose (0,19 euros en el 2015). En el caso de los datos, el coste había bajado hasta un 96%. A partir del día 15, ya no habrá precios máximos ni mínimos: se pagará lo mismo que en el país de origen.