En un comunicado inusual para una entidad que se caracteriza por ladiscreción, el Instituto de la Empresa Familia (IEF) se ha pronunciado en favor de impulsar el Corredor Mediterráneo. Este lobi, que agrupa a un centenar de las principales compañías dominadas por parientes y que suponen más del PIB español, destaca "el interés nacional" que supone esta infraestructura, por lo que reclaman al Gobierno que se ponga manos a la obra.

Según el IEF, la activación de ese gran proyecto "no solo complementaría el modelo radial actual, sino que permitiría vertebrar el territorio nacional y facilitaría el transporte de mercancíashacia Europa, de una de las zonas de España con un fuerte peso industrial y agroalimentario".

Esta gran obra ha sido ampliamente reivindicada y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se comprometió a impulsarla en su reciente visita a Barcelona, en la que anunció inversiones en infraestructuras en Catalunya por valor de 4.200 millones durante esta legislatura.

Además de la vertiente de carga, el corredor facilitará "la circulación de más de 22 millones de personas" y "dotaría a la economía nacional de una fortaleza y competitividad indispensable para su desarrollo y crecimiento", según esta organización, que rara vez se posiciona ante un tema polémico.

El IEF, "debido a la trascendencia de este proyecto, solicita alGobierno que apoye cuanto antes esta iniciativa e inicie la puesta en marcha de esta infraestructura complementaria y vertebradora que está siendo respaldada e impulsada de forma unánime por la sociedad civil, como se ha podido comprobar en los multitudinarios actos celebrados en Valencia, Tarragona y Murcia, a los que se sumará próximamente otro en Almería.

RENTABILIDAD SIGNIFICATIVA

A juicio de esta organización, presidida por Ignacio Osborne, el Corredor Mediterráneo "generaría a medio y largo plazo una rentabilidad claramente significativa, pues la conexión directa de los principales núcleos de este área geográfica y de las cuatro comunidades autónomas que lo representan (Andalucía, Murcia, Comunitat Valenciana y Catalunya) da respuesta a las necesidades del 45% del PIB español, 50% de la población, 47% del tejido productivo, 46% del empleo, 51% de la exportación de bienes o 63% del tráfico de mercancías portuarias, así como del 50% de los turistas que visitan nuestro país".

Esta entidad recuerda que esta infraestructura permitirá "reducir a casi la mitad los tiempos, aumentar la frecuencia de trenes, mejorar la competitividad e impulsar el turismo, aumentar el comercio internacional y la internacionalización, contribuir a un desarrollo económico más sostenible, mejorar las conexiones de los puertos y aeropuertos del Mediterráneo español y sus zonas logísticas e industriales con sus respectivas áreas de influencia de la Unión Europea y con los países vecinos y promover un uso inteligente de las infraestructuras".