A la sociedad del futuro puede que le baste con una simple tarjeta de plástico en la cartera para abonar sus compras -el 93% de los consumidores en la zona euro disponen de una- pero hoy por hoy el dinero en efectivo sigue siendo la opción preferida por los consumidores en la Eurozona. Según un estudio elaborado por el Banco Central Europeo (BCE) sobre el uso de efectivo y tarjetas en los hogares de la zona euro, el 79% de todas las transacciones realizadas en el 2016 tuvieron lugar con dinero contante y sonante de por medio mientras que solo el 19% de los pagos fueron con tarjeta.

El análisis revela también que el gusto por el uso de billetes está más presente en los países del sur, en Eslovenia, Austria o Alemania que en Holanda, Finlandia o Estonia. En los primeros, el 80% de las transacciones siguen realizándose en cash aunque ese porcentaje alcanza el 87% en España e incluso el 92% en Malta.

En el segundo bloque de países, mientras tanto, oscila entre el 45% y el 54%. A medio camino Letonia, Lituania, Eslovaquia o Irlanda con niveles de entre el 71 y 79%, así como Bélgica, Luxemburgo y Francia con un porcentaje de transacciones en efectivo de entre el 63% y 68%.

El estudio desvela otras curiosidades. Por ejemplo, que la media de las transacciones con dinero es de 12,38 euros, aunque varía en función del país del que se hable. Por ejemplo, en el caso de España, Letonia, Francia y Portugal la media del dinero que se abona en efectivo oscila entre los 8,8 y los 7,5 euros. Por el contrario, la media de los pagos más comunes con tarjeta roza los 40 euros aunque la situación oscila entre los 14,3 euros de Letonia, uno de los países más digitalizados de la UE, hasta los 70,78 euros de media de Luxemburgo.

Las diferencias, sin embargo, no son solo geográficas. El género y la edad también juegan un papel importante a la hora de determinar cuánto dinero lleva uno encima o la forma en la que paga. Por ejemplo, según el BCE, los hombres llevan de media 12 euros más que las mujeres en la cartera aunque la cantidad del efectivo que uno lleva consigo aumenta también cuanto mayor es la edad del consumidor. Las estimaciones sugieren que los consumidores de mayor edad llevan una media de 43 euros más que los jóvenes.

Varios factores

«Es difícil encontrar una sola explicación de las diferencias de efectivo en la cartera de los consumidores de la zona euro. Hay varios factores que inciden», sostiene el BCE que apunta a la aceptación de las tarjetas o a la seguridad que ofrece el llevar suficiente dinero en la cartera. La fotografía del BCE muestra también que los consumidores de la Eurozona hacen 1,2 pagos en efectivo cada día.

Los alemanes son a priori quienes llevan la cartera más abultada (103 euros), seguidos de luxemburgueses (102) y austríacos (89), muy lejos de portugueses (29), franceses (32), letones (41), y holandeses (44). Los españoles, mientras, llevan de media 50 euros en la cartera.

El Consejo de Ministros aprobó el viernes el anteproyecto de ley de servicios de pago. Una de sus medidas obliga a los comercios españoles a ofrecer a sus clientes la posibilidad de pagar en otros sistemas que no sea en dinero efectivo si la compra supera los 30 euros.