El consejero municipal de Economía del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Rivarés, ha confirmado hoy los augurios de la auditoría interna del pasado mes de septiembre de que a fecha de noviembre ya están agotadas todas las partidas de 2015 para los servicios básicos obligatorios de la ciudad.

La causa, según ha declarado en rueda de prensa en Zaragoza, no es por falta de liquidez sino de concepción "de modelo político", porque "durante años se han infradotado las partidas para este tipo de servicios" y las deudas se han acumulando "de un año a otro".

Así, ha citado que en el caso alumbrado público, de 4,7 millones presupuestados, hay pendientes de pago 4,4 millones de euros y que la última vez que se abonó fue en agosto de 2014.

Para electricidad de equipamientos municipales estaban presupuestados 19,5 millones, se pagó la ultima vez en septiembre y quedan pendientes 2,4 millones de euros.

Para el autobús público y el de movilidad reducida, había 51,2 millones presupuestados y quedan 6 pendientes de pago, cuando la última vez que se abonó fue el pasado mes de julio.

En el caso de limpieza pública, faltan "casi" 9 millones de los 35,1 presupuestados, mientras que para los centros deportivos faltan 2,6 millones de los 5 incluidos en la partida y la última vez que se abonó fue en abril.

También están pendientes de pago 4 millones para el suministro del agua procedente de Yesa cuando estaban presupuestados 3. La última vez que se abonó fue en septiembre de 2014.

Además de "injusto", al gobierno de Zaragoza en Común "le parece insostenible", ha lamentado Rivarés, quien ha advertido a los grupos municipales que "no está la cosa para bromas", en alusión al rechazo al borrador de Ordenanzas municipales que presentó Zaragoza en Común para 2016 por parte de PSOE, PP y Ciudadanos, que pactaron una propuesta propia.

En este sentido, se ha preguntado "a ver quién es capaz de poner remedio a semejante desmán financiero" después de la "alianza" entre dichos grupos, que han dejado en 3,5 millones de euros los 20 millones de ingresos que tenía previsto recaudar ZeC con su proyecto de impuestos.

No obstante, Rivarés no pierde la esperanza en poder recaudar más "demostrando que se necesita más".

El responsable de las arcas municipales ha garantizado que "se van a mantener los servicios públicos sí o sí", y se está repasando "partida por partida" para ver la posibilidad de nuevas modificaciones de crédito para hacer frente a los compromisos pendientes de pago.

También se está reduciendo gasto en Alcaldía, Protocolo, Viajes o Representación, concepto que va a desaparecer de los presupuestos de 2016; se han vendido cinco vehículos de alta gama, el belén de la plaza del Pilar cuesta 50.000 euros menos y también se va a reducir el de la cabalgata de Reyes, mientras que el gasto de las fiestas del Pilar fue entre 200.000 y 300.000 euros inferior al de 2014.

Se va a proceder a una reforma organizativa de las sociedades públicas y organismos autónomos, reduciendo estructura, costes y a renegociar las deudas con las contratas y los pagos aplazados con Auzasa o FCC, así como de los intereses con Alta Velocidad.

En ese contexto, ha advertido de que "también es importante la actitud del Gobierno de Aragón" y ha vuelto a reiterar la deuda que mantiene con la ciudad de 40 millones de euros por el impago de los ejercicios 2013, 2014 y 2015 del convenio por el tranvía, que insiste en reclamar "con contundencia" y que es "muy importante para las colapsadas finanzas municipales".

Por eso ha pedido al presidente de Aragón, Javier Lambán, "lealtad institucional" y a los cinco grupos municipales un ejercicio de responsabilidad que permita recaudar más en 2016 como ya solicitó públicamente en pleno el alcalde, Pedro Santisteve.

Con los datos con los que cuenta el área que dirige, Rivarés ha explicado que se podría elaborar un presupuesto para 2016 de 693 millones de euros, "muy poco", pero todavía hay que saber "qué pasa" con la deuda del tranvía, con el fondo local, cuál va a ser la dotación de la Ley de Capitalidad o cómo se van a pagar los 13 millones que se le adeudan al Estado por ingresos de más.

Y aunque ha asegurado que lo presentará "pronto" ha reprochado a CHA que le exija que un plazo de diez días cuando PSOE y CHA "pueden presentar en febrero el borrador de presupuestos del Gobierno de Aragón".