La Sareb, el banco malo que recibió los activos inmobiliarios tóxicos de los bancos rescatados, vendió 13.796 inmuebles entre enero y septiembre, el 55% más que un año antes. De estos, 7.855 eran inmuebles propios y otros 5.941 eran unidades ligadas a préstamos. La compañía ha apuntado que el aumento se debe a la recuperación del mercado y a campañas comerciales propias que ha lanzado para agilizar su actividad.

La venta de activos residenciales (viviendas, garajes y trasteros) creció un 50%, hasta las 6.207 unidades, mientras que la comercialización de los no residenciales (naves, locales, hoteles y oficinas) se incrementó un 99,4%, hasta 345 activos. También vendió once promociones y 289 unidades residenciales con la obra en curso, así como 710 suelos, el 31% más

Los ingresos de la firma presidida por Jaime Echegoyen aumentaron un 3,6%, hasta los 2.394 millones de euros. Los ingresos logrados por los préstamos ligados al ladrillo, que suponen el 68% de su activo, se situaron en 1.599 millones, lo que supone una caída del 6,8% debida a los bajos tipos de interés y a las menores amortizaciones de una cartera que va cayendo año a año. La facturación por venta y alquiler de inmuebles, en cambio, subió un 33,3%, hasta los 781 millones.

La Sareb también ha anunciado que su consejero y exministro Rodolfo Martín Villa va a dejar el puesto que ocupaba en representación del público Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) por motivos de edad (83 años). Va a ser sustituido por Eduardo Aguilar Fernández-Hontoria, quien ha sido director general de BNP Paribas, director financiero de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), director general de Seguros y Fondos de Pensiones y responsable de deuda externa en el Tesoro.