La 'segunda vuelta' de las elecciones generales han desbrozado el camino de la investidura para Mariano Rajoy. Pero eso no significa que vaya a tenerlo sencillo para revalidar el cargo. El presidente del Gobierno en funciones necesita sí o sí la ayuda, en forma al menos de abstención, de un por ahora reticente PSOE. Aunque el candidato del PP logre granjearse el apoyo de los grupos más proclives al pacto, entre ellos Ciudadanos, la colaboración socialista seguiría siendo imprescindible.

¿Qué opciones tiene Rajoy de ser investido en primera vuelta?

Solo dos, que por el momento parecen poco plausibles. Para alcanzar la mayoría absoluta (176 votos), el líder del PP tendría que conseguir seguro el apoyo del PSOE y, más accesorio, el de Ciudadanos. Una 'gran coalición' PP-PSOE suma 222 diputados y un tripartito PP-PSOE-Ciudadanos, 254. Solo con el 'sí' del partido naranja, a Rajoy le faltarían seis escaños para ser reelegido a la primera.

¿Qué opciones tiene Rajoy de ser investido en segunda vuelta?

Tres, y todas requieren la abstención socialista. De hecho, el presidente en funciones podría ser investido de nuevo solo el 'sí' de su grupo (137 votos) siempre que el PSOE se abstenga. Si Rajoy opta por un acuerdo más estable, la suma con su aliado natural, Ciudadanos(169 votos), le deja a siete escaños de la mayoría absoluta. Dando por hecho que Unidos Podemos, ERC, CDC y Bildu nunca ayudarían al candidato del PP, y menos aún si ya tiene un pacto con Albert Rivera, las posibilidades de Rajoy se reducen al PNV (5) y Coalición Canaria (1). Pero todavía le faltaría un diputado para lograr más 'síes' que 'noes' en la segunda votación. De nuevo la abstención del PSOE se ha indispensable.

¿Tiene alguna opción Pedro Sánchez de ser presidente?

Aritméticamente sí, pero políticamente lo tiene muy crudo. Partiendo de la base de que el PP nunca le ayudaría a ser investido, el candidato del PSOE tendría que forjarse el apoyo de Unidos Podemos y Ciudadanos, es decir, la misma combinación que buscó en lalegislatura fallida y fracasó en el intento. Una segunda posibilidad sería pactar el 'sí' de la coalición de Pablo Iglesias y la abstención de Ciudadanos, pero de nuevo chocaría con la misma incompatibilidad. La suma del PSOE y Unidos Podemos es de 156 escaños, esto es, a 20 de la mayoría absoluta. Si no pudiera contar con Rivera, Sánchez requeriría el apoyo de al menos tres fuerzas nacionalistas, entre ellas ERC y CDC, cuyos votos siempre ha rechazado.