Los votos tienen un peso distinto según el lugar donde esté la urna y sacar un concejal es mucho más sencillo en un municipio pequeño que en otro de mayor tamaño. Así, casi 20.000 votos necesita un concejal en las ciudades de más de 300.000 habitantes para ser elegido, mientras que en los municipios muy pequeños cada edil representa de media a 26 electores, según un estudio del Ministerio del Interior sobre Elecciones municipales en España.

El informe añade que en los municipios de entre 251 y 5.000 habitantes (por ejemplo, Albocàsser, Alcalà de Xivert, La Jana, Xilxes o Les Coves), hay un concejal por 129 electores. Distinto es el caso de localidades como Moncofa, Nules, Torreblanca o Peñíscola (todas tienen entre 5.001 y 20.000 habitantes) donde hacen falta 503 votos para obtener representación. En las de entre 20.001 y 50.000 habitantes (caso de Almassora, Onda o Benicarló), cada edil necesita el apoyo de mil electores, y en las ciudades de 50.001 a 300.000 (en Castellón solo cumplen ese requisito la propia capital y Vila-real) cada concejal necesita 3.000 votantes.

A nivel nacional, comparar la evolución de esas cifras entre 1979 y 2011 evidencia que el número de electores por concejal ha aumentado en esos 32 años en todos los tramos de habitantes, con la excepción de los municipios más grandes (los que tienen más de 300.000 vecinos), ya que en 2011 había un concejal por cada 17.278 electores censados, mientras que en 1979 la proporción era de 20.149 votantes, según el informe.

Hasta ahora se han celebrado nueve elecciones locales (1979, 1983, 1987, 1991, 1995, 1999, 2003, 2007 y 2011) y los electores han pasado de los 26,6 millones de 1979 a los más de 34 actuales.