A poco más de un mes para que se vacíen las aulas de los colegios de la provincia y dar la bienvenida a las vacaciones de verano, muchas son las familias que se las ven y se las desean para compaginar su horario laboral con el tiempo libre de sus hijos.

Con la cuenta atrás para que den por finalizadas las clases escolares, los padres y madres ya han iniciado la búsqueda de la actividad idónea para satisfacer el ocio de sus peques, para hacer compatible el horario laboral con el familiar, para mantener ciertas rutinas, para reforzar el aprendizaje a través del juego... Y, para cumplir con todos esos objetivos, las escuelas de verano se posicionan como la mejor opción lúdica y de aprendizaje. Cada año estos espacios ganan más adeptos. Y es que cada verano son más las escuelas o campus entre los que escoger en la provincia de Castellón.

Y los hay para todos los gustos. Escuelas que apuestan por un aprendizaje lúdico del inglés junto a otros idiomas como el francés o el alemán; otras que fomentan el aprendizaje a través de la música y los instrumentos; campus que se decantan por el deporte como forma de consolidar valores; y hasta existen centros para todos aquellos interesados en la robótica, la ciencia y la tecnología, en la que los alumnos realizan experimentos científicos y demostraciones a través de talleres prácticos.

De esta manera, Castellón cuenta con una atractiva y amplia oferta para divertir a todos los escolares de la provincia y facilitar, así, la vida diaria de las familias que trabajan durante las vacaciones estivales.

LAS ACTIVIDADES

Los alumnos pueden disfrutar con diversos juegos, deportes, sesiones de cuentacuentos, talleres de iniciación musical, informática, clases de inglés, natación, talleres de cocina y creativos, veladas nocturnas, excursiones al aire libre... Un amplio catálogo de actividades diseñadas para adaptarse a las características de los participantes y ofrecer las máximas garantías de calidad, atención y seguridad a los niños.

Además, los programas de ocio por los que apuestan las escuelas de verano tienen en cuenta la diferenciación por edades, según la temática de cada actividad. Todo, para asegurar la diversión y el ocio de los más pequeños, que pueden participar por las mañanas o, incluso, pasar un día entero, con comida incluida, en los campus.

Así, los padres garantizan que el verano de sus hijos se convierta en único e inolvidable.