El tribunal del 'caso Gürtel' todavía no ha puesto fecha al testimonio que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, prestará en el juicio de la primera época de la trama de corrupción, entre 1999 y 2005, pero considera que debe comparecer para que la Sala pueda contar "con todo el material probatorio necesario" que les "permita llegar a una deliberación en las mejores condiciones".

La resolución, que cuenta con el voto particular del presidente del tribunal, Ángel Hurtado, que propone que el presidente del Ejecutivo declare "desde otro lugar" para evitarle "la exposición pública", señala que, como su declaración obedece a hechos anteriores a su cargo actual, deberá "comparecer ante el tribunal en la fecha que se señale según calendario fijado para el juicio, con aplicación en su caso de las previsiones necesarias en cuanto a su citación para evitar perturbar el adecuado ejercicio de su cargo".

El auto firmado por los magistrados José Ricardo de Prada y Julio de Diego su citación se había rechazado con anterioridad, añadiendo "sin perjuicio de que en otro momento se pueda acordar". Y "ese momento ha llegado", precisamente por la evolución que ha seguido el juicio y "la significativa posición procesal del Partido Popular, que se negó a prestar ninguna declaración respecto de los hechos", pese a estar acusado como partícipe a título lucrativo. En cuestiones previas, el PP pidió la nulidad de las actuaciones como la mayoría del resto de acusados.

Para la Sala, "la situación en la que se encuentra el tribunal es muy diferente a la de antes del inicio de las sesiones del juicio o la posterior cuando tampoco no se había practicado suficiente prueba para llegar a determinadas conclusiones".

"Está en nuestro ánimo", dice el tribunal, "está en nuestro ánimo contar con todo el material probatorio necesario que debidamente propuesto por las partes nos permita llegar a una deliberación en las mejores condiciones, con todos los elementos necesarios para poder ejercer nuestra función jurisdiccional".

EVITARLE LA EXPOSICIÓN PÚBLICA

Sin embargo, todos esos argumentos forman parte de un "formalismo vacío" para el presidente del tribunal, Ángel Hurtado, que se opone a la citación, que critica entre otras razones por "el uso en ámbitos ajenos al judicial que se pueda hacer de tal actuación judicial".

Él mismo admite que ello no debería tener relevancia para la admisión de la prueba, pero añade que sí debe tenerse en cuenta para que "se le tomara declaración desde otro lugar, sin tener que hacerle pasar por la exposición publica".

A lo largo de su exposición, en la que incluye la argumentación de la Fiscalía Anticorrupción para oponerse a la citación, incluida la parte de que "la caja B del PP ha quedado suficientemente acreditada", el magistrado hace un alegato a favor de que Rajoy declare por videoconferencia, dando a entender que la mayoría pretende que declare en persona en la sede de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares (Madrid).