El 'conseller' de Interior, Ramon Espadaler, ha asegurado este viernes que el "chivatazo" de dos policías nacionales a miembros de una célula yihadista que fue desarticulada en Cataluña en abril pasado por los Mossos puso en riesgo la integridad de un agente infiltrado en la organización.

Espadaler, en declaraciones a Cataluña Ràdio, ha evitado calibrar si el agente hubiera podido morir debido a la filtración, pero ha advertido de que cuando un agente está trabajando en estas condiciones "es evidente que informaciones de este tipo ponen en riesgo su integridad física".

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz archivó en febrero de este año la comunicación del incidente realizada en noviembre por los Mossos, pero la Conselleria d'Interior remitió en abril pasado un nuevo informe al magistrado con "indicios fehacientes" que confirmarían esta "interferencia", según indicó ayer Espadaler en la rueda de prensa que ofreció.

El 'conseller' ha precisado este viernes que los Mossos aportaron "nuevas informaciones al respecto" y que están "a la espera de que el juez de la Audiencia Nacional haga lo que crea oportuno". "Desde nuestra perspectiva, los indicios son razonables y solventes. Los Mossos y el 'conseller' no somos temerarios para dar este paso", ha asegurado.

DESENCUENTRO CON EL MINISTRO

Espadaler ha explicado que todavía no ha hablado con el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, sobre esta polémica, aunque ha avanzado que lo hará próximamente "a pesar de la perspectiva diferente que tenemos". El ministro del Interior atribuyó "bajeza" y "ruindad" a los responsables de acusar a la Policía Nacional de boicotear una operación de los Mossos contra una célula yihadista, dijo que la política antiterrorista "no se puede dejar en manos de los que no tienen el mas mínimo sentido del estado" y añadió que esta situación tendrá "consecuencias para el futuro".

Espadaler ha "lamentado" estas declaraciones del ministro y ha resaltado que la comunicación al juez va contra unas personas concretas que hicieron "una mala práctica", y no contra el Cuerpo Nacional de Policía en su conjunto.

"Ha de quedar claro que los Mossos son una policía eficiente y consentido de Estado desde el momento en que trabajan de acuerdo con las instituciones del Estado competentes en la lucha antiterrorista, como la Audiencia Nacional o el Gobierno de España", ha añadido el 'conseller' de Interior.