Un joven de 27 años ha sido detenido como presunto autor de la muerte de su expareja, Verónica Frías, de 24 años, cuyo cadáver fue encontrado hoy en Málaga en un supuesto caso de violencia machista, según han informado a Efe fuentes cercanas a la investigación. La víctima sufrió al parecer heridas en el abdomen y el cuello y tenía una hija de cuatro años de su relación con el presunto agresor.
Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía se han encargado de la investigación tras el hallazgo del cuerpo sin vida en la madrugada de esta martes en el portal del edificio de los padres de la víctima, donde residía ella actualmente y donde supuestamente la esperaba su expareja a que volviera del bar donde trabajaba.
La joven rehusó la pasada semana alojarse en una casa de acogida tras sufrir una supuesta agresión de su expareja, que previamente la maltrató también en octubre de 2009. Los servicios sanitarios acudieron a las 2:48 horas de este martes al número 5 de la calle Pintor Ramos Rosas, en la zona de Ciudad Jardín, de la capital malagueña, tras recibir un aviso de la Policía, pero no pudieron hacer nada por salvar la vida de la chica.
La coordinadora provincial del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM), Estefanía Martín, ha informado a Efe de que la víctima acudió el pasado día 20 al hospital por una agresión, por lo que se siguió el protocolo sanitario establecido para estos casos, que prevé el envío del parte de lesiones al juzgado y la comunicación al IAM.
Dos días después fue atendida por el equipo de trabajo social y psicólogos del IAM, que le ofrecieron hospedarse en una casa de acogida, recurso que ella rechazó porque "se sentía segura" en la casa de su padre y optó por no denunciar a su expareja. No obstante, se tramitaba una denuncia de oficio por la que ella habría sido citada a declarar próximamente en los juzgados.
El IAM ya había atendido a la joven en octubre de 2009, tras una denuncia por una agresión sufrida cuando estaba embarazada de la hija que tiene en común con el supuesto agresor. Entonces ingresó en una casa de acogida, de la que se marchó dos días después tras pedir el alta voluntaria para irse a casa de sus padres.
En el seguimiento de la víctima que se llevó a cabo siempre comunicó que todo iba "normal", por lo que desde 2009 el IAM no había tenido constancia de ningún hecho relevante hasta el pasado 20 de julio, cuando recibió asistencia sanitaria. La chica trabajaba como camarera en una cafetería y hasta hace poco convivía con el supuesto agresor en una vivienda de la barriada malagueña de Puerto de la Torre, según han dicho a Efe fuentes cercanas al caso y familiares.
La Junta de Andalucía ha condenado esta muerte, que eleva a 31 las víctimas mortales registradas en España en lo que va de año, siete de ellas en Andalucía.
