El Gobierno de Pedro Sánchez ve posible un entendimiento con Unidos Podemos para promover en los próximos Presupuestos Generales del Estado que "la recuperación económica llegue a los ciudadanos", pero advierte de que renunciar a la estabilidad presupuestaria pondría en "peligro" el Estado de Bienestar.

Así lo han enseñado fuentes del Ministerio de Hacienda en respuesta a la propuesta presentada este miércoles por la formación que lidera Pablo Iglesias y que, bajo el título "Dejar atrás la austeridad", reclama al Ejecutivo del PSOE una serie de medidas a cambio de dar su apoyo al techo de gasto y a los Presupuestos Generales del Estado de 2019.

Las fuentes consultadas indicaron que el departamento que dirige la ministra María Jesús Montero se encuentra evaluando dicho documento de cara a las negociaciones para la aprobación del techo de gasto y la senda de objetivos de déficit para la elaboración de las cuentas públicas del próximo año.

"Los Presupuestos de 2019 son una oportunidad perfecta para demostrar que es posible conjugar las políticas sociales con el crecimiento económico y la reducción del déficit público", afirmaron desde el Ministerio, para añadir que "el debate tiene que centrarse en las necesidades de los ciudadanos para que la recuperación llegue a las familias".

En este sentido, desde Hacienda ven posible un entendimiento con Unidos Podemos, aunque indican que seguirán negociando con todos los partidos con la intención de aprobar unos Presupuestos "que permitan recuperar los derechos perdidos durante los años de recortes".

Está previsto que el viernes 24 de agosto el Consejo de Ministros apruebe el 'techo de gasto' y la senda de déficit y deuda sobre los que, en caso de ser aprobados por el Congreso de los Diputados y el Senado, se elaborarán los PGE de 2019, que deberían presentarse en septiembre en la Cámara baja.

La intención del Gobierno es volver a presentar la misma senda de déficit y deuda que ya fue rechazada por el Congreso el pasado 27 de julio, cuando el PNV y Nueva Canarias fueron las únicas formaciones que sumaron su voto favorable al PSOE. En dicha votación, Unidos Podemos se abstuvo al considerar insuficiente el aumento del techo de gasto aprobado por el Ejecutivo así como que la senda de estabilidad presentada continuaba con la política de austeridad del anterior Gobierno del PP, por lo que la coalición pide unos objetivos de déficit y deuda más flexibles.

Por ello, en el documento presentado por Unidos Podemos reclama al Gobierno de Pedro Sánchez diversas medidas para aumentar los ingresos tributarios del Estado, al señalar que la recaudación de España se encuentra ocho puntos porcentuales por debajo de la media europea. Entre las propuestas, se encuentra la implantación de un impuesto a la banca, el establecimiento de un tipo mínimo efectivo del 15% en el impuesto de sociedades, incrementar los tipos marginales más altos del IRPF, y la eliminación de las Sicav y de las exenciones fiscales a los planes privados de pensiones.

Desde el Ministerio de Hacienda consideran que "hay margen para elevar la aportación tributaria de las grandes corporaciones y algunos sectores que escapan del radar de Hacienda" y que el incremento de la recaudación se puede hacer "sin afectar a la clase media, las pymes y los autónomos". Para ello, el Gobierno se encuentra estudiando el documento de Unidos Podemos pero, por el momento, no se pronuncia sobre ninguna de las medidas concretas planteadas.