Un alumno de Dirección de Empresas-BBA de Esade, Alfonso Zamarro, ha ideado el proyecto DEA Drones para atender emergencias médicas en Barcelona, que consiste en articular una red de drones en los tejados de la ciudad equipados con desfibriladores y cámaras con un radio de actuación de tres minutos.

La idea de Zamarro ha quedado finalista en la cuarta edición de los World Smart Cities Awards y acaba de obtener el Premio Adecco a la Idea Joven más Brillante, ha informado la escuela de negocios.

"Queremos crear una red de drones que permitan proporcionar un mejor servicio a la ciudadanía, facilitar la movilidad, puesto que es aéreo, y ayudar a optimizar los recursos disponibles en la ciudad", ha explicado Zamarro.

Según ha detallado, antes de empezar a diseñar el servicio se dedicaron a analizar cuáles son los problemas reales del actual servicio de emergencias SEM 112 en Barcelona, cómo funciona por dentro y cómo sería su trabajo con su servicio.

A pesar de que la iniciativa se ha diseñado, en primera instancia, para la ciudad de Barcelona, los problemas que DEA Drones viene a resolver están presentes en cualquier lugar del mundo y en cualquier servicio de emergencias, por lo que, según su inventor, podría expandirse tanto globalmente como a otros servicios de emergencias.

El equipo de DEA Drones, que ha dado a conocer su proyecto en el marco del Smart City Expo World Congress que se celebra estos días en Barcelona, ha destacado que "las tecnologías avanzan a gran velocidad, por lo que se trata de una innovación viable tecnológicamente a corto plazo".

"En los próximos años, podremos ver drones prestando servicios de emergencias, lo cual representa una oportunidad real y rápida para las smart cities", ha sentenciado Zamarro.

La idea, que surgió inicialmente como una propuesta de proyecto de negocio como trabajo de fin de grado, tenía como origen ofrecer un servicio mediante una red de drones equipados con desfibriladores para atender a personas que hubieran sufrido un paro cardíaco en plena calle en la ciudad de Barcelona.

"El problema principal es que los médicos del SEM sólo disponen de la información que le proporciona la persona que llama por teléfono", ha explicado Jordi Guasch, profesor de ESADE, tutor del proyecto y actualmente también socio y cofundador de DEA Drones.

La solución sería que, además, pudiera ver lo que está pasando y al accidentado. "Esto hizo cambiar el enfoque del proyecto para orientarlo a un servicio de drones equipados con cámaras de alta definición que se convirtieran en los ojos del médico al cabo de un minuto de estar hablando por teléfono", ha señalado Guasch.