Pablo Iglesias ahonda en la polémica desencadenada por el escrache a Felipe González, en el que estudiantes enmascarados impidieron que el expresidente pronunciase una conferencia en la Universidad Autónoma de Madrid, este miércoles. El líder de Podemos considera que ese boicot es una muestra de "salud democrática" y reprocha la "piel fina" de algunos políticos.

"Creo que es un síntoma de salud democrática que los estudiantes tuvieran la suficiente memoria para decir que no es bonito que en un centro universitario intervenga quien saca pecho con el terrorismo de Estado", ha señalado. Sus comentarios, en los pasillos del Congreso, son una vuelta de tuerca más en el discurso de Iglesias, que en las últimas semanas ha endurecido sus críticas al expresidente socialista y ha llegado a reivindicar el polémico discurso de la 'cal viva', en la fracasada investidura de Pedro Sánchez, en marzo.

El jefe de los podemistas ha admitido que no comparte la "forma" con la que se llevó a cabo el escrache, pero ha insistido en que la universidad es un escenario habitual de protestas estudiantiles. "En democracia no se puede tener la piel tan fina cuando se protesta", ha opinado y ha criticado el trato que recibe en los medios de comunicación. Más tarde, en una conversación informal en los pasillos del Congreso, ha explicado que hubiese preferido que la protesta se hubiese desarrollado de forma tranquila y que le hubiesen permitido hablar para contrastar opiniones.

El diputado socialista Pedro Saura ha afeado desde la tribuna del Congreso el boicot y ha mostrado su "total repulsa" a un acto "para impedir la libertad de expresión".