Turno de Iñaki Urdangarín. El yerno del Rey ofrecerá hoy en Palma su versión ante el juez José Castro. El fiscal Pedro Horrach le acusa de enriquecerse con fondos públicos sirviéndose de sociedades controladas por él y su socio Diego Torres y de desviar parte de los beneficios a paraísos fiscales. El interrogatorio se prevé largo y retrotraerá al imputado al año 2003, cuando aceptó la invitación de Torres, entonces profesor en ESADE, para sumarse al Instituto Nóos, «una especie de ONG» dedicada al mecenazgo y que pasó de languidecer a captar cantidades ingentes de administraciones públicas y empresas privadas. «Los jefes eran Urdangarín y Torres». La frase la han repetido decenas de veces sus antiguos empleados, lo que obliga al duque a hablar, máxime después de que su socio guardara un silencio táctico ante el juez y reconociera ante la policía que «esto es muy serio».

LOS FONDOS PÚBLICOS

¿Cómo pactó con Matas y Camps?

De los acuerdos suscritos, Urdangarín deberá dar especial cuenta de los alcanzados con la Generalitat valenciana de Francisco Camps y el Govern balear de Jaume Matas, que le reportaron 5,8 millones de euros entre el 2004 y el 2007 por tres ediciones del Valencia Summit, dos del Forum Illes Balears, unos juegos europeos no celebrados en la capital del Turia y el patrocinio del equipo ciclista Banesto. El duque de Palma deberá despejar cómo se gestaron esos convenios, que le llevaron a utilizar el Palacio de Marivent como oficina, según el exdirector de Deportes de Baleares, José Luis Ballester, y cómo facturó «a precios desorbitados» o por «servicios no prestados» a unas administraciones que lo ficharon a dedo y obviando todo control.

LOS JEFES

¿Dirigía el duque de Palma el entramado?

«Entre que la convocatoria partía de la conselleria y que quien estaba allí realmente era Urdangarín, empezó a no gustarnos. Pensaba que había algo de tufo», declaró el ex presidente del Valencia, Juan Bautista Soler, uno de tantos empresarios que se dejó seducir por la figura del yerno del Rey para confiarle recursos. El Villarreal le pagó 690.00 euros por un informe plagiado de internet. Testimonios como el de un empleado de la caja de ahorros Sa Nostra revelan que Urdangarín acudía en persona a convencer de las bondades de sus iniciativas. Ahora, el marido de la infanta Cristina podrá explicar porqué esas aportaciones no recortaron el coste para las administraciones, como preveían los convenios.

UNA «ESPECIE DE ONG»

¿Era Nóos realmente una tapadera?

El duque de Palma también deberá aclarar si el Instituto Nóos (la entidad que presidió oficialmente hasta el 2006 y que después pasó aparentemente a dirigir su socio Diego Torres) era en verdad una entidad sin ánimo de lucro o una tapadera de fachada altruista para beneficio propio y de su socio, y si utilizó o no su condición de miembro de la familia real para atraer negocios.

Del entramado societario urdido para facturar a esta asociación y llevar a sus bolsillos hasta 5,8 millones de euros, Urdangarín responderá sobre dos empresas: Nóos Consultoría, que compartía con Diego Torres, y Aizóon, donde se reparte las acciones al 50% con su mujer, la infanta Cristina. A través de estas mercantiles, se hizo con un patrimonio en ladrillo que supera los nueve millones de euros, realizó inversiones financieras de calado y llevó un alto tren de vida. Documentos obrantes en la causa revelan que se practicó el cruce de facturas y una atípica gestión de personal para pagar menos impuestos. Urdangarín se repartía a medias los beneficios con su socio, del que se distanció al sospechar que le robaba.

LA RED EN EL EXTRANJERO

¿Evadió la trama dinero a Belice?

En su declaración, también deberá responder por los manejos de otra sociedad, De Goes Center, utilizada presuntamente para sacar dinero de España a países donde se pagan menos impuestos. A su frente, se colocó como administrador a Mario Sorribas, la misma persona en la que confiaron los duques de Palma como apoderado de Aizóon cuando partieron hacia Estados Unidos en el 2009. Urdangarín tendrá que aclarar por qué sus iniciales y su nombre aparecen en anotaciones y correos de su contable sobre artimañas para cobrar en el extranjero. Las últimas pesquisas han localizado una segunda empresa con «altas probabilidades» de estar vinculada al yerno del Rey y que sigue el mismo esquema: matriz en Belice, paso por Londres y cobros en Luxemburgo.