La policía francesa arrestó el pasado martes a tres hombres que mantenían un contacto frecuente con Driss Oukabir, uno de los jóvenes encarcelados por su vinculación con la célula de Ripoll que atentó contra Barcelona y Cambrils el pasado 17 de agosto. Ayer, la justicia francesa dejó en libertad a dos de los detenidos pero el tercero, un hombre nacido en 1986, pasará a ser formalmente investigado.

Después de registrar su domicilio e interrogarlo, las autoridades francesas consideran que existen «evidencias consistentes», según la agencia Reuters, de que el detenido desempeñó alguna función en la ejecución de los atentados terroristas que sufrió Cataluña en agosto y que dejaron 16 muertos y un centenar de heridos.

Las detenciones en Francia se activaron después de que los Mossos d’Esquadra y la Guardia Civil comunicaran a la policía francesa que habían identificado a Driss Oukabir, hermano de Moussa --uno de los cinco terroristas abatidos por la policía catalana cuando pretendían llevar a cabo una masacre en el paseo marítimo de Cambrils--, en Ripoll un mes antes de los atentados. Entre Driss y los tres arrestados, además, existía una comunicación telefónica fluida.

La conexión entre uno de los miembros de la célula de Ripoll con tres hombres que tenían antecedentes penales por delincuencia común en Francia -existen precedentes de atentados en suelo francés perpetrados por personas con antecedentes leves- llevó a las autoridades de este país a detenerlos. Tanto para investigar si participaron de algún modo en la preparación o ejecución de los atentados de Barcelona como para averiguar si representaban una amenaza para Francia, el país más golpeado por el terrorismo islamista.

REGISTROS // Ayer, después de que la policía francesa entrara en sus viviendas para registrarlas a fondo y los interrogara sobre cualquier duda que despertara su vida durante los últimos meses, un juez decidió que solo la de uno de ellos resulta sospechoso.

Esa operación policial, a instancias de una comisión rogatoria lanzada por España, se desarrolló en el marco de una investigación abierta por la justicia francesa el pasado 31 de enero en relación con los atentados de agosto pasado en Cataluña por los cargos de tentativas de asesinato y terrorismo.

Por otra parte, el Ayuntamiento de Cambrils se personará como acusación particular en la causa de los atentados del 17-A, que instruye el juzgado central número 4 de la Audiencia Nacional, según informa el consistorio.

El Ayuntamiento de Cambrils, en condición de perjudicado, quiere ejercer las acciones penales y civiles que le corresponden; exigir responsabilidades y dar apoyo a las víctimas y a los familiares. De este modo, el consistorio quiere dar cumplimiento a su compromiso de proporcionar toda la ayuda y apoyo a las personas que sufrieron y sufren las consecuencias del delito que se investiga en este procedimiento.

El consistorio velará por la instrucción y la condena de los atentados, «por su envergadura y trascendencia para el interés general» y por «haber marcado la historia del municipio».