La jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela ha ampliado la imputación que ya pesaba contra el exmayor de los Mossos Josep Lluís Trapero, por un nuevo delito de sedición en esta ocasión por el 1-O. La magistrada, que hasta ahora le imputaba ese delito pero únicamente referido a las protestas del 20 y 21 de septiembre en Barcelona, le ha citado a declarar el próximo viernes.

La jueza, que anuncia la posibilidad de imputarle también en el futuro un delito de organización criminal, argumenta que la finalidad del exmajor se orientaba a celebrar el referéndum y la proclamación de una república catalana, independiente de España, siendo consciente de que actuaba al margen de las vías legales, «desatendiendo el mandato recibido desde el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) y en contra de las decisiones del Tribunal Constitucional». También el viernes comparecerá ante Lamela, pero como testigo, el actual jefe de los Mossos, el comisario Ferrán López, jefe de la Comisaría Superior de Coordinación Territorial.

Además, la magistrada ha librado oficio a la Secretaría de Estado de Interior para que le remitan el instrumento por el que se nombró a Diego Pérez de los Cobos para coordinar el dispositivo de seguridad con el que se pretendía dar cumplimiento al mandato del TSJC, encaminado a evitar la celebración del referéndum ilegal. La jueza quiere saber las competencias y responsabilidades que se le atribuyeron a De los Cobos.