Alrededor de medio centenar de subsaharianos permanecen encaramados a la valla de Melilla tras el intento de entrada protagonizado sobre las seis de la mañana por unos 300 inmigrantes, de los que una veintena consiguió acceder a la ciudad autónoma.

Los inmigrantes se encuentran subidos a la valla en la zona de Mariguari y Farhana, dos puestos fronterizos del perímetro que separa Melilla de Marruecos.

Sobre las seis de la madrugada, un grupo de unos 300 inmigrantes se han aproximado a la valla por la zona comprendida entre el aeropuerto y el puesto fronterizo de Barrio Chino, de los que al menos 20 lograron acceder a Melilla, y otros se han desplazado hacia Farhana y Mariguari.

Los inmigrantes que han conseguido superar el vallado perimetral se han dirigido hacia el Centro de Estancia Temporal (CETI) con gritos de "Bosa, Bosa", un cántico de victoria que suelen utilizar cuando consiguen pisar suelo español.

Allí han sido recibidos por sus compañeros, quienes los han acogido con abrazos.

Algunos de los inmigrantes que han logrado acceder han manifestado a Efe que proceden de Camerún y han asegurado sentirse muy felices por haber conseguido por fin cruzar al otro lado de la valla.

Se trata del segundo grupo que consigue entrar a Melilla con la malla antitrepa ya instalada, después de que una veintena lo hiciera el pasado 1 de julio.

El despliegue policial permanece en la zona de Mariguari, mientras que la carretera de circunvalación, que discurre paralela a la valla, ha sido cortada por esta zona.

En las puertas del CETI, decenas de subsaharianos aguardan la llegada de algunos de sus compañeros.