Francisco Nicolás Gómez Iglesias, más conocido como el pequeño Nicolás, alegó ayer «alteraciones psiquiátricas» para no ser imputado en la causa abierta por la querella que le interpuso el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) después de que asegurara que dicho organismo lo había espiado ilegalmente. El pequeño Nicolás se enfrenta a una pena de multa de 5.400 euros por un delito de injurias y calumnias. La Fiscalía y la Abogacía del Estado solicitaron la realización de un examen para averiguar si el acusado está inhabilitado para este juicio.