Los barones de Podemos tendrán una autonomía limitada en las múltiples negociaciones con los socialistas para alcanzar acuerdos que expulsen al PP de los gobiernos autonómicos. Será la dirección política del partido, desde Madrid, la que establezca la estrategia común de pactos y las líneas rojas con las que los secretarios generales de cada territorio afronten luego los detalles específicos. El líder del partido, Pablo Iglesias, ha reivindicado que el pilotaje se haga desde la sede madrileña de Podemos, en la calle Princesa. Él mismo mantuvo este miércoles una conversación con el secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, en la que hablaron de la situación política del país y de los dos grandes ejes que Podemos prioriza en las negociaciones: tolerancia cero a la corrupción y medidas de rescate ciudadano, dos conceptos que Iglesias y Sánchez no han ampliado y que previsiblemente abordarán en un encuentro la próxima semana en Madrid.

Iglesias explicó este martes que ha de ser la dirección de Podemos la que tome las riendas en las negociaciones y, ante la posibilidad de críticas, recordó que en la asamblea fundacional del partido, en Vistalegre (Madrid) el pasado mes de noviembre, se estableció que el objetivo prioritario es ganar las elecciones generales y que, por lo tanto, toda estrategia ha de perseguir ese fin.

Tras el 24-M, los cuadros directivos de Podemos no han comparecido en rueda de prensa --a diferencia de PP, PSOE y Ciudadanos-- pero en diversas entrevistas en platós de televisión, Iglesias ha confirmado que será la dirección la que dirija las negociaciones. El secretario de organización, Sergio Pascual, que ya coordinó el diálogo entre Podemos y PSOE tras las elecciones andaluzas, tendrá un papel relevante en las conversaciones y, previsiblemente será el enviado especial de Iglesias en distintas las arenas autonómicas.

PRÓXIMA REUNIÓN

El politburó de Podemos tomará las primeras decisiones a lo largo de esta semana. De momento, el martes se reunió la ejecutiva para realizar un primer análisis de resultados y dirimir cómo encarar las primeras llamadas con otras fuerzas políticas, y este viernes está previsto un encuentro de la secretaría política, que dirige Íñigo Errejón, con los secretarios generales de cada autonomía. En esa conversación, Iglesias y Errejón transmitirán a sus líderes autonómicos el planteamiento general de las negociaciones, que luego se concretará en los territorios de acuerdo con las aportaciones específicas de cada autonomía.

Finalmente, el sábado se reunirá el consejo ciudadano de Podemos, que debería refrendar la estrategia elaborada desde la secretaría política. Ante el consejo, Iglesias realizará una exposición del escenario político tras el 24-M y también intervendrán Errejón y Carolina Bescansa, la responsable de análisis, para hacer un diagnóstico del resultado electoral.

VALENCIA Y BALEARES

No está clara cuál va a ser la respuesta de los líderes autonómicos a la estrategia marcada desde Madrid, pero de momento Iglesias ya ha anunciado que la intención es que el partido no entre a formar parte de gobiernos presididos por el PSOE. En esta línea general existen dos excepciones: la Comunidad Valenciana y Baleares. En Valencia, según explicó este miércoles Iglesias en una entrevista en Cuatro, Podemos se plantea la posibilidad de apoyar a la candidata de Compromís, Mònica Oltra, en lugar de dar su confianza al socialista Ximo Puig, una situación que se podría repetir en las Islas Baleares con MÉS. "El diálogo se podría ampliar a más cuestiones", apuntó Iglesias en referencia a estas dos autonomías.

El jefe de filas de Podemos también ha anunciado ya que sus diputados autonómicos se bajarán el sueldo a tres veces el salario mínimo, como hicieron los cinco eurodiputados del partido en mayo del 2014, cuando accedieron a sus escaños en el Parlamento Europeo.