La contraoferta de Pablo Iglesias a Pedro Sánchez para formar un Gobierno de coalición ha causado un profundo malestar en el PSOE. No tanto por el contenido del documento, aunque los socialistas también consideran que pone muy difícil el acuerdo al apostar por el referéndum en Catalunya, como por la actitud del líder de Podemos. “Hemos asistido con perplejidad, preocupación y decepción a la comparecencia de Iglesias”, ha dicho el portavoz parlamentario del PSOE, Antonio Hernando, minutos después de conocerse el texto del partido morado.

“Perplejidad porque una vez más Iglesias demuestra que no sabe ni dónde está ni qué papel le corresponde. Preocupación por el tiempo que ha perdido para el diálogo no es suyo sino de la ciudadanía y del país. Y decepción por su falta de respeto al tiempo de Pedro Sánchez y del PSOE y al encargo de la Jefatura del Estado”, ha continuado Hernando, que ha equiparado al secretario general de Podemos conMariano Rajoy, el presidente en funciones, que tras rechazar el encargo que le hizo el Rey para presentarse a la investidura envió un documento negociador a los partidos para buscar su apoyo. “Le pedimos a Iglesias lo mismo que le hemos pedido a Rajoy:respeto”, ha señalado el dirigente socialista.

QUIÉN OSTENTA LA INICIATIVA

El razonamiento del PSOE es que fue Sánchez el candidato propuesto por el Rey, y que es a él a quien le “corresponde liderar las conversaciones para el diseño de un Gobierno de cambio progresista y reformista”. Por lo tanto, hasta que no se produzca este reconocimiento, el aspirante socialista no se reunirá con Iglesias, un encuentro que el líder de Podemos ha pedido que se produzca entre este lunes y el próximo jueves.

Iglesias, que ocuparía una vicepresidencia con competencias reforzadas según su oferta de Gobierno, incluso ha dicho que estaría“encantando de recibir” a Sánchez. “Pablo, no sabes dónde estás. Y en qué momento que nos hemos perdido el jefe del Estado te ha encargado la investidura. Hay un candidato que se llama Pedro Sánchez. No se llama Pablo Iglesias”, le ha contestado Hernando.

ENCUENTRO DE LOS EQUIPOS

Mientras tanto, los socialistas se han mostrado dispuestos a que sucomisión negociadora se reúna con la de Podemos, que aún no está formada. Sería un encuentro, ha dicho su portavoz parlamentario, en el que se abordaría el programa de gobierno del PSOE (en el que el partido diluye el federalismo pero realza su perfil de izquierdas) y también se estudiaría el de Podemos con la vista puesta en la sesión de investidura, que el presidente del Congreso, Patxi López, ha fijado este lunes para el próximo 2 de marzo.

“Lo que pensamos del documento de Podemos se lo diremos a Podemos y a sus representantes tan pronto como nos reunamos con ellos”, ha dicho Hernando, que no ha querido entrar en el contenido del texto. Aun así, fuentes socialistas interpretan que Podemos, con su propuesta, pone muy difícil cualquier entendimiento. Entre otros motivos, porque continúa abogando, como condición "imprescindible" por un referéndum en Catalunya sobre la independencia que imposibilita a Sánchez a sentarse a negociar. “La autodeterminación, el separatismo y las consultas que buscan el enfrentamiento sólo traerán mayor fractura a una sociedad ya de por sí divida. Son innegociables para el Partido Socialista y la renuncia a esos planteamientos es una condición indispensable para que el PSOE inicie un diálogo con el resto de formaciones políticas”, señaló el PSOE en su hoja de ruta sobre los pactos, aprobada en el comité federal del pasado 28 de diciembre.

AVANCES CON IU

Pero los socialistas, pese a que la participación de Podemos en una eventual alianza resulta indispensable, no van a quedarse quietos. Este lunes, al mismo tiempo que se producía la comparecencia de Iglesias, han informado de sus avances con IU, que cuenta con dos diputados. Según el PSOE, ambas fuerzas han llegado a "acuerdos sustanciales" sobre distintas materias. En el apartado deemergencia social, han pactado la creación de un ingreso mínimo vital para las familias más necesitadas, el incremento del salario mínimo, así como garantizar el suministro de agua en todos los hogares. En legislación laboral, derogar la polémica reforma del PP y aprobar un nuevo estatuto de los trabajadores. El PSOE e IU también han acordado derogar la 'ley mordaza', aprobar una ley de muerte digna, reformar el sistema electoral para que sea más proporcional y endurecer los delitos de corrupción.