En una negociación contrarreloj, las defensas de Pablo Crespo y de Álvaro Pérez, 'el Bigotes', confían en arrancar un acuerdo a Anticorrupción, aunque sea minutos antes de declarar este viernes ante el juez central de Instrucción, José María Vázquez Honrubia, por la financiación irregular del PP valenciano. Pero el ministerio público, en cambio, prefiere decidir si rebaja su petición de pena en función de los "datos y hechos relevantes" con los que amenazan al PP de Francisco Camps, sobre todo después de contar ya con la declaración de nueve empresarios y del jefe de la Gürtel, Francisco Correa. Esta discrepancia sobre los tiempos puede echar al traste la aparente decisión de ambos de seguir el ejemplo del que fue su jefe.

Tanto Miguel Durán, abogado de Crespo, como José Javier Vasallo, de Pérez, se acercaron este jueves a Anticorrupción para abordar una rebaja de las penas de 22 y 27 años de cárcel a las que se enfrentan respectivamente sus clientes. A grandes rasgos quieren que se rebajen los cuatro años que se piden por la falsedad, para asegurarse menos años en prisión, al poder lograr el tercer grado tras cumplir el triple del delito castigado con más pena. Pero no parece fácil y más que ello se extrapole a otras causas, como la del 'caso Fitur', por la que ya están presos.

Nerviosismo

Sin embargo, el anuncio que ambos hicieron el miércoles y que obligó a suspender el juicio hasta este viernes llevó el nerviosismo a las filas del PP, pese a la versión oficial de que todos los acusados ya están fuera del partido y que cualquier hipotética condena estaría "amortizada". Especialmente ante la declaración que pueda prestar Crespo, que se incorporó a las empresas de Correa desde el PP gallego. Según el jefe de la trama, fue a él a quien el exsecretario general del PP valenciano Ricardo Costa le dijo que si querían cobrar los servicios prestados al partido debía facturárselos a ciertos empresarios.

Su nombre fue la principal novedad que aportó Correa, que ya admitió haber facturado a quien se le decía en el juicio de la primera época de la Gürtel. Es algo que no estaba previsto y que pone en muy difícil situación al ex responsable del PP valenciano, quien, según Efe, también se plantea aportar datos relevantes cuando deba declarar.