El líder del PSOE ha concluido la primera ronda de negociaciones con las fuerzas políticas que podrían favorecer su investidura mediantamente satisfecho. Pese a que el viernes Pablo Iglesias le puso entre la espada y la pared al exigirle que elija entre Podemos y Ciudadanos a la hora de sustentar el acuerdo que permita la gobernabilidad, Pedro Sánchez ha transmitido este sábado, tras finalizar con el PNV los primeros contactos, que el "diálogo" hasta ahora ha sido "positivo", lo que le permite concluir que "hay mimbres dentro de la complejidad para construir una alianza progresista de cambio" que le aupe al poder y permita que avance la legislatura.

Sánchez ha reconocido que a partir el lunes, cuando su equipo negociador se reunirá con sus homólogos del resto de fuerzas para ir perfilando los contenidos que permitan el acuerdo, "empieza" la fase "importante", la que permitirá vislumbrar qué partidos apoyan o no su investidura. "Será en el qué donde decidamos la aritmética", ha reflexionado. La próxima semana el PSOE enviará a Ciudadanos, IU, Compromís, Nueva Canarias, Coalición Canaria y el PNV un documento que recoja los siete ejes en torno a los cuales quiere que giren las conversaciones, para que estos partidos hagan sus aportaciones.

Sánchez remitirá también a Podemos el documento porque, según ha subrayado en rueda de prensa, la "puerta sigue abierta" y la "mano tendida" para que se incorporen a la conversaciones. "Pido a Iglesias que reconsidere su posición porque son más las cosas que nos unen que las que nos separan", ha aseverado, para a continuación detallar los posibles puntos de acuerdo, como un plan de emergencia social, que pare los desahucios y reduzca la desigualdad, o la recuperación de derechos y libertades.

IU Y COMPROMÍS SÍ CONTINUAN EN LAS NEGOCIACIONES

El líder del PSOE ha recordado a los podemistas que fuerzas como IU y Compromís están dispuestas a continuar en la negociación y que la "mayoría" de las fuerzas no imponen "vetos" que propociarían, ha remarcado, que continue el PP en el poder.

Sánchez ha reconocido, no obstante, que los votos de los populares son necesarios para reformar la Constitución, uno de los ejes -junto con la recuperación económica justa, las medidas para favorecer el empleo, luchar contra la desigualdad, entre otros- sobre los que Sánchez preve que pilote el posible acuerdo. Por ello, entre otros motivos, el líder del PSOE intentará reunirse la semana próxima conMariano Rajoy. Asimismo, convocará a reuniones encabezadas por él a ERC y Democràcia i Llibertad, aunque para trasmitirles su rechazo a la hoja de ruta independentista. Con quien no tiene previsto reunirse es con EH Bildu.

EL PNV PEDIRÁ LA "AGENDA VASCA"

Este rechazo ha sido criticado por presidente del PNV, Andoni Ortuzar, quien sin embargo se ha mostrado dispuesto a apoyar su investidura sin imponer en la negociación "líneas rojas". El peneuvista ha manifestado que pedirán en las negociaciones la inclusión de una "agenda vasca" que se desarrolle a lo largo de la legislatura, con medidas para superar las heridas que provocó la violencia, un nuevo estatus jurídico-político para Euskadi y políticas destinadas a atajar la crisis. Pero se ha mostradoconciliador y consciente de que ni los seis diputados del PNV son completamente determinantes ni Sánchez puede, en cuatro años de legislatura, satisfacer todas sus demandas.