Los sindicatos calculan que han secundado las primeras horas de la jornada de huelga en el sector ferroviario entre el 80% y el 90% de los trabajadores con posibilidad de sumarse al paro, esto es, que no están incluidos en la prestación de servicios mínimos, según indicaron a Europa Press en fuentes de las federaciones ferroviarias de CC.OO. y UGT.

Los sindicatos coincidieron en asegurar que se está respetando el cumplimiento de los servicios mínimos, pese a considerarlos "abusivos", y que la jornada se desarrolla con normalidad, con la excepción de las detenciones de tres manifestantes en Atocha.

De su lado, en fuentes de Renfe también aseguraron que, salvo este incidente, la jornada se desarrolla con normalidad y cumplimiento de los servicios mínimos decretados por el Ministerio de Fomento, que garantizan la circulación del 73% de los trenes AVE y Larga Distancia y hasta el 75% de los de Cercanías en hora punta.

En fuentes de CC.OO. indicaron que los datos de seguimiento que reciben de las distintas comunidades indican que en la mayoría "el 90% de los trabajadores que no están incluidos en mínimos ni de permiso se han sumado al paro".

De su lado, la sección ferroviaria de UGT indica que, según sus cálculos, entre el 75% y el 80% de los trabajadores de Renfe, Adif y Feve están secundando el paro, porcentaje que eleva hasta el 90% en el caso de los empleados de talleres.

Todos los sindicatos denunciaron el incidente registrado a primera hora de la mañana en la estación de Madrid-Atocha, en el que tres personas fueron detenidas.

Según informó CGT en un comunicado, representantes de los sindicatos denunciarán los hechos por considerar que constituyen un "abuso que atenta contra los derechos fundamentales de los trabajadores, como es el derecho de reunión y el derecho a la huelga".

Con esta jornada de huelga, todos los sindicatos con representación en el sector ferroviario (CC.OO., UGT, Semaf, CGT, Sindicato Ferroviario y Sindicato de Circulación) pretenden protestar contra de la apertura a la competencia del transporte en tren en julio de 2013 y la segregación de Renfe en cuatro compañías.

Se trata de la segunda jornada de huelga que los sindicatos secundan en contra de esta reestructuración ferroviaria aprobada por el Gobierno en julio, dado que sucederá al paro que ya llevaron a cabo el pasado 3 de agosto, coincidiendo con los desplazamientos de las vacaciones de verano.

Los tres trabajadores ferroviarios detenidos en la estación de Madrid-Atocha este lunes intentaban acceder a las instalaciones para pedir las cartas de servicios mínimos a los conductores de los trenes, según ha indicado a Europa Press el portavoz de UGT en Renfe, Miguel Angel Escolano.

Escolano vincula el "forcejeo" con la Policía Nacional a que los agentes les han impedido entrar a pedir esas cartas.

El dirigente sindical denunció asimismo que los servicios mínimos decretados por el Ministerio de Fomento para la jornada de huelga son un "escándalo" y "un atentado contra el derecho de huelga".

No obstante, manifestó su satisfacción con la adhesión a la huelga, dado que ha cifrado en un 90% el seguimiento de los paros entre los conductores.

La Jefatura Superior de Policía ha explicado a Europa Press que las tres detenciones (dos en el andén de Cercanías y la otra en el de Alta Velocidad) se realizaron por desobediencia y resistencia a la autoridad y por intentar saltar el cordón policial que protege la estación ferroviaria.

Los servicios mínimos fijados por el Ministerio de Fomento ante la jornada de huelga convocada en el transporte ferroviario para este lunes, 17 de septiembre, garantiza la circulación de hasta el 73% de los trenes de Alta Velocidad de Renfe y hasta el 75% de los de Cercanías.

Todos los sindicatos con representación en el sector (CC.OO., UGT, Semaf, CGT, Sindicato Ferroviario y Sindicato de Circulación) tienen convocado para este lunes un paro en contra de la apertura a la competencia del transporte en tren en julio de 2013 y la segregación de Renfe en cuatro compañías.

Se trata de la segunda jornada de huelga que los sindicatos secundarán en contra de esta reestructuración ferroviaria aprobada por el Gobierno el pasado mes de julio, dado que sucederá al paro que ya llevaron a cabo el pasado 3 de agosto, coincidiendo con los desplazamientos de las vacaciones de verano.

En Cercanías, los servicios mínimos fijados ante el paro garantizan la circulación de una media del 50% de los trenes habitualmente programados, si bien este porcentaje se eleva hasta el 75% en el caso de las horas punta de Cercanías de Madrid.

En cuanto a los trenes AVE y Larga Distancia, los servicios esenciales fijan la circulación del 73% de los trenes inicialmente previstos para esa jornada, y en servicios interurbanos (regionales) se asegura el 65% de los tráficos.

En el caso de Adif, se fija que el 18,35% de la plantilla trabaje en servicios mínimos para garantizar así la circulación de los trenes de Renfe incluidos en mínimos, así como las actividades de información y venta de billetes.

En cuanto a Feve, los servicios esenciales oscilan según las diferentes gerencias, entre un 5,68% en el ámbito corporativo y el 31,26% en el de gestión de capacidad de la red. COMPATIBILIZAR MOVILIDAD Y HUELGA.

Con estos servicios mínimos, decretados por Fomento al no alcanzarse acuerdos al respecto entre Renfe, Adif y Feve y los sindicatos, el Ministerio busca "compatibilizar el interés general de los ciudadanos y sus necesidades de movilidad, con el derecho a la huelga".

Los sindicatos, con esta segunda jornada de huelga, persiguen manifestar su rechazo a la reforma ferroviaria y abogar por el diseño de un modelo ferroviario público y de calidad, y el mantenimiento de Renfe como operadora sin división alguna de la compañía.

De su lado, con su reforma, Fomento pretende que el transporte en tren y las empresas públicas que lo prestan sean "eficientes, racionales, competitivas". Según sus datos, en la actualidad, el ferrocarril cuesta al erario unos 2.500 millones de euros anuales, mientras que Renfe, Feve y Adif suman pérdidas de 447 millones y una deuda de 20.730 millones.

En el sector ferroviario público español trabajan actualmente un total de 28.929 empleados, repartidos en Adif (13.224 empleados), Renfe (13.848 trabajadores) y Feve (1.857)