Si por algo se caracterizan los partidos de izquierda es por la exigencia de sus votantes. Buena muestra de ellos se podrá observar este domingo en 'Salvados', el programa de Jordi Évole (La Sexta, 21.20 horas), que reúne a cinco electores de Podemos con el líder del partido, Pablo Iglesias, para debatir sobre la evolución de una fuerza que el pasado enero cumplió tres años de vida.

Durante la conversación, todos los votantes reprochan de una manera u otra a Iglesias la gestión de la crisis interna en el partido y le afean las formas que ha utilizado en algunas ocasiones. "¿No le estamos dando de comer al 'Sálvame deluxe' de la política?"; "Yo discuto con mi pareja y no voy por la calle dando gritos"; "Hay que saber cuándo callar y cuándo lo tienes largar", son algunos de los comentarios que le lanzan a Iglesias, en clara alusión a las discrepancias aireadas con el hasta hace poco número dos de la fuerza y relevado en el congreso de Vistalegre del pasado febrero, Íñigo Errejón. Asimismo, hacen hincapié en la necesidad de escuchar a las bases, que en la Asamblea Ciudadana clamaron por la "unidad".

Otra de las participantes en el programa le afea duramente que planteara la Asamblea Ciudadana como un ultimátum, al afirmar que si su proyecto no recibía la mayoría de los votos dejaría la secretaría general. "Ese puntito ego subido me ha dolido, me he sentido amenazada en el momento que dijiste o todo conmigo o sin mí. (...) Eso me sonó a amenaza y me molestó muchísimo", remacha.

En otro momento de la charla, Iglesias se declara partidario de apoyar una hipotética moción de censura del PSOE en el caso de que Pedro Sánchez ganase las primarias, e incluso de entrar en un gobierno liderado por el socialista. "A mí me parecería bien entrar en ese gobierno porque si estás en política no estás para mancharte solo la punta de los dedos, estás para mancharte todas las manos", afirma, al tiempo que puntualiza que sería necesario pactar antes un programa.