La Vall d’Uixó es una ciudad en la que las fiestas y las tradiciones populares adquieren una relevancia indiscutible para los vecinos. Desde marzo, con las Fallas, que inauguran el calendario festivo local, el municipio va enlazando celebraciones que recorren la práctica totalidad de las calles, en una constatación de ese carácter abierto de unos vecinos que disfrutan de la convivencia, de la convivencia y la hermandad.

La alcaldesa, Tania Baños, no tiene ninguna duda sobre la importancia que tienen las fiestas para la Vall, entre ellas, claro está, las Fallas. Tanto es así, que no duda en afirmar que “tienen el apoyo del Ayuntamiento, desde donde estamos al lado de las comisiones, como demostramos en todos los actos que se organizan desde la Junta Local Fallera”. Una programación que para Baños “fomenta la unión y la hermandad”, dos elementos esenciales “porque solo unidos tendremos una fiesta fuerte a la altura de lo que suponen las Fallas para la Vall, con siete comisiones y muchas familias implicadas cada año”.

A su vez, la alcaldesa está convencida de que “las Fallas son de los falleros y falleras, y de la gente de la calle, como ha sido históricamente” una realidad que, a su parecer, se ve enturbiada cuando “algunos pretenden hacer partidismo o política con esta tradición popular”. Tania Baños es firme al afirmar que “las Fallas no son de ningún partido político, ni se pueden utilizar de forma interesada, porque se hace daño a ese sentimiento fallero tan arraigado”. Sumidos en la programación y con el sonido de los petardos, el olor de la pólvora y el ambiente fallero inundando las calles, Baños quiere insistir en una idea: “Este Ayuntamiento estará siempre al lado de la fiesta, para sumar y no para restar”. Es por ello que invita a los vecinos a implicarse en esta celebración que está abierta a todos, como demuestran las diferentes comisiones falleras cada día.