La visita a Peñíscola no solo evoca sensaciones por la espectacularidad de su arquitectura o la relación del municipio con el mar. Desde hace una década se puede disfrutar de la Tisana del Papa Luna. Un producto que tiene su origen seis siglos atrás, cuando el castillo fue sede pontificia de Benedicto XIII, y que fue redescubierto hace algo más de una década. Todo ello gracias a Juan Bautista Simó, cronista oficial de Peñíscola y un enamorado de su localidad y de la figura histórica más importante que ha habitado en ella.

Un intento de envenenamiento del Papa fue el origen de esta fórmula, que tiene como ingredientes semillas de coriandro, anís, hinojo, alcaravea y comino, raíces de díctamo y regaliz, así como canela y azúcar. “El preparado repuso al Papa Luna de las graves secuelas producidas por el frustrado envenenamiento con el cual se le pretendió eliminar en 1418”, explica Simó, y desde ese momento se popularizó y prescribió por parte de boticarios valencianos “como digestivo y remedio de flatulencias, dolores de cabeza, dolencias de riñón y también como preventivo de tensiones estresantes”.

VENTA // La labor de investigación histórica fue seguida del análisis de la fórmula y su posterior comercialización, que comenzó en 2006. Es un producto original y distintivo de Peñíscola, incluido en el registro de la Oficina Española de Patentes a nombre de Juan Bautista Simó, quien cedió el producto al Patronato de Turismo de Peñíscola para su promoción y difusión como recurso cultural identificativo de la ciudad.

En la actualidad se puede disfrutar en dos elaboraciones. Se encuentra la variante en grano, que se prepara con agua caliente en instrumentos como infusioneros, mientras que posteriormente se añadió la caja de veinte bolsas de filtro monodosis.

Desde su comercialización, la tisana se ha convertido en un producto típico de Peñíscola, y en una presencia usual en la parte final de una comida o cena. La imaginación de los cocineros locales también ha permitido que haya elaboraciones preparadas a base de tisana, tanto en dulces como en licores que encierran su especial aroma y gusto dulzón. Otra preparación ha sido en caramelos, como los que se han repartido en algunas ediciones de la feria de turismo Fitur, representando a Peñíscola.

PLANTAS // En su origen, los ingredientes que conformaban este alivio digestivo papal eran de presencia habitual en las inmediaciones de Peñíscola, tanto en sus campos de cultivo como en el impresionante paraje de la Serra d’Irta. En la actualidad, el cultivo de la mayoría de plantas ya no se realiza, por lo que desde hace unos años se trata de hacer un ‘huerto pontificio’ que dé a conocer esta variedad botánica. H