"Con él se acaba este tipo de actores que tenían una relación con el público que es muy difícil lograr". Así ha descrito el actor Álvaro de Luna a su compañero, Alfredo Landa, fallecido hoy a los 80 años.

"Quizá es el último actor de esos que ellos solos eran capaces de llevar al público al cine", ha contado a Efe De Luna tras conocer la muerte de Landa.

El actor conquense ha recordado que fue junto a Alfredo Landa con quien rodó su "primer papel importante", en "Las que tienen que servir", del director José María Forqué.

Pese a que ha reconocido que "hacía tiempo que no se veían", De Luna guarda en su recuerdo "el esfuerzo", "la inteligencia" y la "facilidad de interpretación" de Landa.

"Con él tenía la sensación de no saber si era un actor que se había preparado en exceso su personaje -ha expresado- o si era que tenía la facilidad para expresar sentimiento".

Pero De Luna ha destacado también que Alfredo Landa era un "navarro serio y comprometido con su trabajo" y una persona muy "familiar".

"Le gustaba mucho jugar al mus, tenía una forma muy sencilla de convivencia, no tenía la cabeza a pájaros, tenía los pies en la tierra", ha concluido.

Las últimas apariciones públicas de Landa datan de 2008, cuando recibió el premio de la Unión de Actores por su papel en "Luz de domingo", de José Luis Garci, la Medalla de Oro del Ayuntamiento de Madrid y el Premio Príncipe de Viana a la Cultura 2008 en su tierra, Pamplona, y de manos del Príncipe de Asturias.

Fue su retirada, tras haber recibido el año anterior el Goya de Honor, el tercero de su carrera después de los obtenidos como mejor actor por "El bosque animado" (1987) y "La marrana" (1992).