Nicotina, sangre, balas perdidas y las tramas más hurañas y viscerales que una mente en su sano juicio pueda urdir”, así define el director de Castelló Negre, Pablo Sebastiá, la muestra que este año llega a su séptima edición. Tras una semana de presentaciones por todas las sedes del certamen (Peñíscola, Onda, Benicàssim y Almassora), la librería Plácido Gómez fue escenario de la puesta de largo del ciclo en Castellón, con la asistencia de la concejala de Cultura del Ayuntamiento, Verònica Ruíz, el vicepresidente de la Diputación y diputado delegado de Cultura, Vicent Sales; Mauro Gómez, gerente de Plácido Gómez, y los concejales de Peñíscola y Onda, Rafael Suescun y Encarna Ribes, respectivamente, como testigos del evento.
IMPULSO // Sales puso en valor la importancia del festival “porque ha ido creciendo poco a poco hasta convertirse en el segundo más importante de España”. “Por eso la Diputación siempre ha estado apoyándolo; creemos en la cultura y como elemento de atracción turística”, manifestó el popular.
Mientras, Ruiz aseguró que con Castelló Negre, “la ciudad una vez más se coloca en el mapa cultural gracias al género negro”. Por su parte, Gómez resaltó que “tras el boom de la novela histórica, ahora la novela negra es la que está pegando fuerte”. “De hecho un 40% de la novela que se vende ahora en la librería es de género negro”, detalló durante la presentación.
Castelló Negre oferta más de 40 actos, con conferencias, exposiciones, proyecciones de películas y presentaciones de libros. Tendrá como estrellas invitadas al exfiscal general del Estado, Eduardo Torres Dulce, Luis Alberto de Cuenca y Luis Herrero. H
