El castillo de Peníscola acogerá el XXIII Festival de Música Antigua y Barroca durante la primera quincena de agosto. El cartel programado no solo reúne una selección de piezas musicales de primer nivel internacional, sino que también pretende consolidar la fortaleza del papa Luna como un referente del turismo cultural.

Durante la primera jornada, el 1 de agosto, habrá animación con Arrima’t a la música barroca en la playa Norte. Será el aperitivo de una de las grandes novedades, un concierto pensado para las familias, a las 22.30 horas, con el título de Johann Sebastian Bach, la vida loca d’un ogre genial. Al día siguiente, a medianoche, se disparará un espectáculo piromusical a cargo de la Pirotecnia Peñarroja de la Vall d’Uixó. Junto a los fuegos de artificio sonará una selección de obras de Georg Händel.

un Atractivo cultural // La presentación, en el salón de actos del Museu de Belles Arts de Castellón, contó con la asistencia del conseller de Cultura, Vicent Marzà; el vicepresidente y diputado provincial de Cultura, Vicent Sales; y el alcalde, Andrés Martínez, entre otras autoridades. «La apuesta de la Diputación por el turismo pasa por poner en valor los mejores escenarios de nuestra tierra en festivales y deportes», explicó Sales. «El castillo es el emblema turístico por excelencia de Castellón y trabajamos para conseguir reforzar ese posicionamiento con eventos culturales de calidad», añadió. Asimismo, el vicepresidente de la Diputación recordó que el Festival de Música Antigua y Barroca sigue la tónica marcada por el XXI Festival de Teatro Clásico, que durante las fechas actuales se está desarrollando en el mismo patio de armas de la fortaleza medieval.

CARTEL DE PRESTIGIO // A los actos de la jornada inaugural le sigue un calendario de ocho conciertos cuya hora de inicio será las 22.30 horas. El día 3 de agosto se interpretará la obra Chiaroscuro. Llums i ombres del barroc espanyol. El día 4, Italian Stravaganza. El lunes 6, tras la repetición de Arrima’t a la múscia barroca en la playa norte, sonará Domenico Scarlatti, antiguos mitos y sombras. Al día siguiente, 7 de agosto, se tocará Cantigues, tradició medieval, mientras que el día 8 se interpretará Diàlegs i improvisacions. D’Orient a occident i de l’antic al nou món. El festival encarará su recta final con Vivaldi a Bohèmia, el jueves 9; Ícaro del amor. Musica española del siglo XVIII a la moda, el viernes 10; y Flauto veneziano para concluir con la edición de este año el sábado 11 de agosto.