La fuerza dramática de Edipo Rey, la tragedia escrita por Sófocles, llenó y enganchó en la noche del pasado sábado a los espectadores que, por cuarta ocasión, llenaron el patio de armas del Castillo del Papa Luna dentro de la XIX edición del Festival de Teatro Clásico Castillo de Peñíscola. Pleno hasta el momento. Esta versión escrita por Miguel Murillo y dirigida por Denis Rafter fue puesta en escena por la compañía Teatro del Noctámbulo, consiguiendo una muy buena respuesta del público, que entró a la perfección en la intensidad dramática.

Sobre las 17.00 horas del sábado ya se colgó el cartel de no hay billetes, lo que demostró el interés por esta obra magistral ya en su concepción en cuanto a estructura y la fuerza de unos personajes que arrastran con fuerza el argumento, dentro de un escenario minimalista en el que los cubos tienen un significativo papel metafórico a lo largo de la representación.

La terrible realidad que rodea a Edipo Rey le irá aprisionando conforme se desarrolle la acción hasta desembocar un final que apela a la justicia, en una llamada -hasta hoy sin éxito-- a abandonar el camino de la maldad y desarrollar el de la bondad.

Los fuertes aplausos del final en el patio de armas del Castillo demostraron que la obra había calado entre los asistentes. Edipo Rey era una de las apuestas importantes de la presente edición del Festival de Teatro Clásico de Peñíscola y, visto el resultado, fue satisfactoria. Un certamen, el de la XIX edición, con sello cervantino y un guiño a Shakespeare en los aniversarios de estos dos genios, sin perder de vista el teatro grecorromano. H