La presencia de la máxima figura del toreo actual, Julián López El Juli, en los carteles de la próxima Feria de la Magdalena de Castellón, parece una realidad. Aunque la empresa no ha hecho públicas las combinaciones de la misma, cada vez toma más fuerza el posible regreso del torero madrileño a esta plaza, tras cinco años de ausencia. El propio diestro lo confirmó en los micrófonos del programa radiofónico Aquí, el toreo de la 99.9 Valencia Radio. «Creo que sí que voy a estar este año en la Magdalena. Ahora mismo estoy muy al margen de las contrataciones, intento no estar pendiente, pero mi apoderado Luis Manuel Lozano me ha hablado del interés que tienen los empresarios en que esté en la feria de 2017. Hacía cinco años que no pisaba ese ruedo y estoy encantado de volver», explicaba El Juli con un tono muy alentador.

GRANDES FERIAS // Junto a Castellón es probable que esté en las grandes ferias de principio de temporada, como Valencia o Sevilla, cosos que también asoman en el horizonte: «Y Madrid, Bilbao y Pamplona... Ahora mismo no me he planteado una temporada sin asistir a esas plazas». Y todo, asumiendo su liderazgo, llevando el peso de la púrpura, tirando del carro con la responsabilidad y la seriedad de quien es considerado un torero de época: «Tengo una línea y un sentido en el toreo y lo he intentado mantener todos estos años. Me he propuesto estar veinte años en el mismo nivel, al mismo ritmo, asumiendo mi responsabilidad, mi lugar y mi sitio. Intento estar donde me quieren y, por supuesto, también donde me necesitan. Quedan dos años para esa fecha, después no sé lo qué pasará. No lo he pensado, no sé si cambiará algo o no habrá nada», se aventura a desvelar.

Julián López matará posiblemente en Castellón la corrida de Garcigrande, uno de sus hierros preferidos. ¿No deberían las figuras abrirse a más ganaderías?, le preguntamos. «Matamos las que creemos que son mejores para que la gente salga feliz de la plaza. Hay mucha demagogia y tópico en esta cuestión. Creo que hay ganaderías que marcan un nivel superior en cuanto a regularidad para conseguir el triunfo que la gente espera y, sin embargo, están muy lejos de ser las ganaderías más cómodas. Son las ganaderías que te exigen torear bien de verdad, que es lo más difícil que tiene el toreo. El toro que sale hoy es el más bravo que ha salido nunca y la gente se emociona con el mismo», explica el torero.

En toda su carrera como matador de toros, El Juli ha hecho el paseíllo en Castellón en un total de trece tardes, en las que ha cortado diecinueve orejas y ha salido hasta en seis ocasiones por la puerta grande. Un palmarés repleto de éxitos, como aquel del 30 de marzo del año 2000 en el que tuvo el gesto de matar victorinos, llegando a cuajar una faena en la que se le pidió el rabo. Olvidado queda algún lunar, como la tarde en la que recayó sobre él todo el peso de una muy terciada corrida de Victoriano del Río. Castellón le recibe ahora con ganas de poder disfrutar de la plenitud de su tauromaquia.