“El público de Castellón es muy exigente y eso me gusta”

Ternura, humor inteligente y plena actualidad en un diálogo entre José María, un sacerdote de los de toda la vida, y el seminarista revolucionario Tomás, interpretado por Bruno Ciordia. Fernández, feliz de estar otra vez en Castellón, dice que el público de esta tierra es “exigente” y sabe discernir qué es y qué no el buen teatro, y eso le “gusta”.

--¿Qué es ‘Enfrentados’?

--Regreso otra vez a Castellón con una comedia en la que un sacerdote de los de siempre y un joven seminarista confrontan dos visiones diferentes de la vida. Un cura veterano con sus vanidades y gustos neoburgueses, con las de un joven que se quiere comer el mundo y que apoya el sacerdocio de las mujeres, el que los curas se casen, el matrimonio gay y con referencias directas a la nueva Iglesia del papa Francisco.

--Críticas a la Iglesia, pero desde el respeto…

--La Iglesia actual tiene la vista cansada y el colesterol, y hay que mejorar el estado de salud de una institución con más de dos mil años de historia que, pese a todo, sigue vigente y con una gran sabiduría. La obra es una reflexión de los tiempos modernos.

--Otra vez en Castellón. ¿Cómo es el público?

--Es un público muy exigente. Muy aleccionado y que sabe qué es lo de calidad y lo que no. Y me gusta ese tipo de públicos. Vuelvo a Castellón porque sé que mucha gente se quedó sin poder ver la obra y reclamaban que volviéramos. No soy quién para decirlo, pero Enfrentados es muy buena obra. Que impacta y con un final inesperado. Y he cuidado al máximo cada detalle para hacer, sobre todo, un buen espectáculo teatral.

--¿Cuál es la situación del teatro que se hace en España?

--Siempre se ha hablado de la crisis del teatro. Es la gran leyenda, pero yo creo que hay crisis en todas las profesiones. Es verdad que está afectando el 21% del IVA cultural, pero lo que está claro es que, si ofreces un buen producto teatral la gente responde. H