Sedano Vázquez no tuvo suerte ayer en Valencia. El descabello le dejó sin premio en su primero. Tenía la oreja amarrada e incluso la estocada entera le hizo daño al novillo, pero tardó en caer y no manejó con acierto la cruceta. Dos avisos le sonaron.

Una pena porque dejó muy buen sabor de boca en su debut en Valencia, ante un novillo de González Sánchez-Dalp que aunque no humilló, sí embistió con movilidad y buen son. Bien con el capote, manejando los brazos con soltura e imprimiendo variedad. Lo recibió a porta gayola. Ya en la muleta, toreó con aplomo y serenidad, dejando momentos de buen toreo, sobre todo sobre la diestra. A su segundo, de corto recorrido, lo toreó con exposición en una faena muy por encima del novillo. Otra vez la espada se interpuso en su camino. H