Es la primera vez que cantará en Castellón (mañana jueves en el pub Terra, a las 23.30 horas), aunque fue uno de los gurús del desaparecido ciclo Los sonidos de la biodiversidad, que trajo a la capital de la Plana las músicas del mundo. A Daniel Cros no le gustan las etiquetas, pero sí se considera un cantautor independiente (“no tengo discográfica, sino sello propio) y busca “las emociones que se transmiten por medio de una voz”. Es tajante al señalar que “no solo existe la música anglosajona, hay otros ritmos, otras culturas musicales, y hay que redescubrirlas, ponerlas en valor.

--¿Qué ofrecerá en su concierto en Castellón?

--Será un acústico, con guitarra y piano, y con las canciones de mi último trabajo No más canciones tristes, así como otros temas que han formado parte de mi trayectoria musical.

--Con una mixtura de jazz y ritmos latinoamericanos, ¿no?

--Sí. He buscado la sonoridad del folclore latinoamericano con ritmos de Colombia, Argentina, Brasil, México... una música de colores.

--¿Usted se considera un cantautor independiente?

--No me gusta la etiqueta de independiente. Todos dependemos de algo y de alguien, y eso cuestiona la propia independencia. No dependo, eso sí, de una casa discográfica. Yo tengo mi propio sello y eso me concede mayor autonomía.

--Sus comienzos fueron en las míticas salas de Madrid (Rock-Ola) y Barcelona (Magic, Kharma y Boira). ¿Qué queda de todo aquello?

--He ido paso a paso. Bien es verdad que comencé con el pop-rock, pero al final he cumplido mi sueño de dedicarme a la música, de crear una canción y compartirla.

--¿Apostando por otros sonidos, no solo por la música anglosajona exclusivamente?

--Hay que redescubrir las músicas de otros mundos, que tienen un potencial enorme y que apelan a las emociones. H