El Año del Voluntariado que celebra la Conselleria de Bienestar Social de la Generalitat Valenciana tuvo ayer en Castellón su máxima expresión en forma de música clásica con la interpretación de la ópera Las bodas de Figaro, de Wolfgang Amadeus Mozart, a cargo de la Orquesta Sinfonietta de Varsovia, bajo la dirección de Pilar Vañó y la participación de solistas de la Ópera de Cámara de la capital polaca. Más de mil personas asistieron a esta cita musical en lo que constituye el primer acto oficial de este Año del Voluntariado.

El evento, que contó con la presencia del alcalde de Castellón, Alberto Fabra; la concejala de Servicios Sociales, Carmen Amorós, la de Tercera Edad, Marisa Ribes, así como de la subsecretaria de la Conselleria de Bienestar Social, Pilar Máñez, se enmarca en la voluntad de "refrendar el apoyo al sector del voluntariado, como una forma de reconocer la valiosa contribución del trabajo altruista al progreso social", como una de las filosofías de las celebraciones del año del voluntariado, indicaron desde la propia Conselleria.

PRESUPUESTO El presupuesto global de este evento conmemorativo asciende a 1,5 millones de euros en el conjunto del 2006.

Fuentes cercanas a la Conselleria calificaban de "imprescindible la labor social para el bienestar de la población". "Un trabajo de compromiso, tolerancia y generosidad", reiteraban.

En la actualidad, un 23% de los valencianos mayores de edad colaboran con organizaciones de voluntariado. Esta cifra supera en un 11% a la media nacional, lo que sitúa a la Comunidad Valenciana como la cuarta autonomía con mayor número de voluntarios. Pese a ser un dato alentador, la Conselleria de Bienestar Social ha subrayado la intención de su Gobierno de seguir trabajando para satisfacer una de las principales necesidades de las ONG, que según una encuesta de la FSVCV, requieren de la colaboración de entre 5.500 y 6.500 nuevos voluntarios.

Alcanzar esta meta se ha convertido en una de las prioridades del Año del Voluntariado.