El emblemático y polifacético artista de Vinaròs, Carles Santos Ventura (1940), ha muerto este lunes. El Ayuntamiento de la localidad ha comunicado su fallecimiento y ha mostrado su "más profundo dolor por la pérdida del músico, compositor, fotógrafo, cineasta, escritor, escultor, artista total y genial, vinarocense universal".

Desde el consistorio apuntaron que "no podemos aquí repasar una trayectoria única y llena de hitos variados, reconocida en todo el mundo" y repasaron algunos de sus reconocimientos, "sí podemos citar algunos de los galardones que mereció durante su dilatada trayectoria este Hijo Predilecto de la Ciudad de Vinaròs: el premio Nacional de Música (en la modalidad de composición) del Ministerio de Cultura, los Premios Nacionales de Composición y Teatro de Cataluña, el Premio Ciudad de Barcelona a la Proyección Internacional, la Creu de Sant Jordi, Miquelet de Honor de la Sociedad Coral El Micalet de Valencia, Premio Carles Salvador a la trayectoria individual de Maestrat Viu, y hasta 12 Premios Max a las artes escénicas".

Además, señalaron que "hoy, además de glosar el artista y su fecunda obra, queremos recordar al hombre, al amigo, al vinarocense que nunca dejó de lado a los suyos. Desde esta corporación queremos dar el más sentido pésame a todos los familiares y amigos de Carles Santos y expresar, en nombre de todos los vinarocenses, nuestro reconocimiento a la trayectoria y personalidad de esta figura irrepetible".

Compositor, cineasta, escenógrafo, fotógrafo y creador textual además de pianista, Santos fue galardonado a lo largo de su prolífica carrera con distinciones como la Cruz de Sant Jordi Generalitat de Catalunya 1999, la Medalla de Oro del Círculo de Bellas Artes 2007, varios premios MAX de artes escénicas y la Medalla de la Universitat de València.

Poco después de conocer su fallecimiento, el president de la Generalitat, Ximo Puig, ha agradecido a través de Twitter la "mirada" de Carles Santos, de quien ha dicho ha sido "un artista impresionante, un valenciano universal y una persona comprometida con su tierra".

En declaraciones a EFE, el alcalde de Vinaròs, Enric Pla, ha lamentado la pérdida de este "vecino ilustre" de la localidad y ha afirmado que la corporación municipal se reunirá próximamente para determinar los actos en homenaje a la figura de Santos.

"El músico, compositor, fotógrafo, cineasta, escritor, escultor, artista total y genial" ha fallecido este mediodía, sobre las 15 horas, según ha explicado Pla, en el municipio que le vio nacer y donde había residido durante los últimos meses.

El alcalde ha reconocido la brillante trayectoria internacional del artista pero, además, ha recordado a Santos como "hombre, amigo, vinarocense que nunca dejó de lado a los suyos".

La corporación municipal ha traslado el "más sentido pésame a todos los familiares y amigos de Carles Santos" y ha expresado su reconocimiento "a la trayectoria y personalidad de esta figura irrepetible", a quien se nombró Hijo Predilecto en 2003.

Además, el alcalde ha afirmado que este año precisamente se conmemoraba el vigésimo quinto aniversario de los Juegos Olímpicos de Barcelona, en los que Santos compuso el tema "¡HOLA!" para la ceremonia inaugural como parte del álbum "Música para las ceremonias Olímpicas Barcelona 92".

Santos, considerado uno de los artistas más prolíficos e interesantes de la vanguardia española de las últimas décadas, tenía una obsesión artística con el piano como eje vital y subversivo de su obra musical, fotográfica, teatral, literaria o cinematográfica.

A través de su carrera combinó el piano con la composición, la pintura y la escultura, y llevó a cabo impactantes "performances" en algunos de sus espectáculos, donde mezclaba su pasión por las artes con el erotismo y la cotidianeidad.

Según explicó la Universitat de València cuando le concedió su Medalla, en 2015, Santos empezó a estudiar música de muy pequeño (con 5 años ya tocaba el piano) y posteriormente estudió en el Conservatorio Superior de Música del Liceo de Barcelona, donde destacó como alumno.

Continuó los estudios en París, con los maestros Février, Casadessus, Magda Tagliaferro y Margaret Long, y, más tarde, en Suiza, como alumno de Harry Datymer.

En 1961 empezó a actuar como pianista, con obras de Bartók, Schönberg y Webern, y siete años más tarde se trasladó a Estados Unidos, donde conoció a músicos de vanguardia como John Cage, cuya obra marcó su estilo y estética posteriores que paseó como intérprete por escenarios de todo el mundo.

En los años 70 fundó con Josep Maria Mestres Quadreny el Grupo Instrumental Catalán (GIC) y conoció a Pere Portabella, con quien empezó a trabajar en el cine como compositor, intérprete, guionista e incluso realizador, y desde 1978 se dedicaba exclusivamente a la composición e interpretación de su propia obra.