En la pobla hi ha un vell / en la pobla hi ha un vell / que li diuen tio canya; / porta gorra i brusa negra / porta gorra i brusa negra i una faixa morellana... Tio Canya, canción icono de los derechos y libertades en el País Valenciano. De aplecs y memoria de un pueblo, y que cumple 40 años de su composición.

Reviscola, Tio Canya, amb gaiato si et fa falta... una letra que regresa a Castellón con un espectáculo homenaje con la participación de Musicants, Miquel Gil, Sis Veus per al Poeta, Pep Gimeno Botifarra, Miquel Gironés con Xiromita Trad Project, Apa, Teresa y Josemi Sánchez y, por supuesto, Al Tall, muñidores de un himno, de una declaración de intenciones, de un permanente amanecer en la reivindicación del valenciano, de una victoria salpicada de tantas derrotas históricas.

Teatres de la Generalitat se suma al apoteósico regreso de tan popular como reivindicativo personaje musical. El Tio Canya, el hombre de pueblo tan denostado por saber única y exclusivamente valenciano, de nuevo está vivo porque, según Vicent Torrent, autor de la canción, conviene seguir manteniéndola viva. «Nos gustaría dejar de cantar esta canción, como si fuera un mal sueño, pero hay cosas que no pasan de moda», advierte.

Y lo que no pasa de moda es el rechazo de lo diferente, de lo que no se entiende. Por eso Torrent señala que entonces, hace 40 años, el valenciano «estaba en la UVI» y ahora, pese a todo, «sigue muy grave», resalta.

CONTEMPORÁNEA // De manera que esa mezcla de tradición y modernidad, que abanderó durante cuatro décadas la banda de Vicent Torrent, sigue viva. Josep Vicent, a la hora de presentar el legado de Tio Canya, abunda precisamente en esa idea de que no fuera «una pieza de museo», sino que tuviera «contemporaneidad». Por su parte, Abel Guarinos, director del Institut Valencià de Cultura, asegura que, además de la letra reivindicativa evocadora de ese «mal sueño», la música de Tio Canya también posee un poder «que trasciende a la simple pesadilla ideológica», concreta.

Un espectáculo que llega a la capital de la Plana después de su presentación en Valencia, en el Teatro Principal, el pasado día 19, y en Alicante, el 21, en el Teatro Arniches, en dos emocionantes veladas con lleno absoluto.

Escrita como se ha dicho antes por Vicent Torrent y editada en el segundo disco de Al Tall, Deixeu que rode la roda, la canción explica la evolución del valenciano en el siglo XX, las dificultades administrativas con las que han de luchar sus usuarios, el largo proceso de minorización a que fue sometida durante años y las renuncias lingüísticas de la burguesía urbana en Valencia y Alicante, y mucho menos en Castellón, por el sello liberal e ilustrado de esa burguesía, todo hay que decirlo.

Un tema que también está lleno de esperanza puesta en la escuela como principal institución capaz de revertir la situación.

Pero, además, el espectáculo Reviscola Tio Canya retroatrae al esplendor de la Nova Cançó en valencià con los recordados Els Pavesos, Paco Muñoz, Carraixet, Raimón, Ovido Montllor, Els 4 Z, Josep Lluis Valldecabres, Lluís El Sifoner, Araceli Banyuls y, cómo no, el castellonense Félix Estop. Pueblo, lengua, senyera, señas de identidad. País Valencià.