Los monoplazas de F-1 son esta temporada más difíciles de poner a punto a causa de la nueva reglamentación, de la mayor carga aerodinámica, y sobre todo, de los nuevos neumáticos, más anchos y más críticos en su rango de temperaturas de uso. Así que a los ingenieros y los pilotos les aguarda mucho trabajo para la tercera sesión de entrenamientos libres, que se celebrará dos horas antes de la clasificación de mañana porque la niebla, mezclada con la contaminación, ha impedido hoy que los coches rodaran en las dos primeras mangas de libres del Gran Premio de China, que se celebra este fin de semana en Shanghai. La razón principal es que la espesa niebla no permitía volar al helicóptero médico. Solo se registraron unos minutos de condiciones en la primera sesión y ni uno solo en la segunda. Así que los monoplazas de F-1 solo pudieron rodar durante unos minutos en la primera manga.

LO PRIMERO, LA SEGURIDAD

La primera sesión comenzó a la hora prevista pero, en apenas unos minutos, dirección de carrera tuvo que sacar la bandera roja ya que Whiting fue informado de que el helicóptero médico no podía aterrizar en el hospital designado para una posible evacuación. Como marca el reglamento, no puede haber actividad en pista si el helicóptero no puede volar, y los monoplazas tuvieron que volver a sus garajes. Sólo Magnussen, Grosjean, Massa, Stroll, Kvyat, Vandoorne, Alonso, Palmer, Sainz y Hulkenberg salieron a pista en los primeros instantes y apenas pudieron completar una vuelta de instalación.

La sesión se mantuvo detenida durante más de 40, con el reloj avanzando, hasta que se volvió a encender el semáforo verde al final del pitlane. Todos los coches salieron a pista para tratar de recuperar parte del tiempo perdido, la mayoría de ellos con neumáticos intermedios ya que la pista se estaba secando ante la ausencia de lluvia. No duró mucho la tranquilidad, y Nico Hulkenberg protagonizaba un trompo en la salida de la curva 2 quedándose atrapado en la puzolana, obligando a dirección de carrera a neutralizar la sesión con un coche de seguridad virtual.

EL DOMINGO PUEDE LLOVER

Cuando los comisarios lograron sacar el Renault de la grava, de nuevo la bandera roja hacía aparición en el circuito a falta de 23 minutos para el final de la sesión, otra vez por la imposibilidad de operar del helicóptero médico al haber sido cerrado el tráfico aéreo por la niebla. A falta de cinco minutos para la bandera a cuadros, Charlie Whiting dio por finalizada una sesión en la que apenas se pudo ver rodar a los monoplazas.

En la segunda sesión no llegaron ni a rodar. Los equipos permanecieron en sus garajes preparados, pero la densa niebla de humedad y contaminación a las afueras de la terrible ciudad de Shanghai (25 millones de habitantes) no permitió realizar ningún trabajo. Parece que la tercera manga se podrá celebrar mañana con una previsión de tiempo más seco, mientras que las predicciones de lluvia se mantienen para la carrera del domingo que tiene previsto arrancar a las 8.00 hora española