Un morro de punta redondeada es la novedad más apreciable, dentro de un diseño que recuerda mucho al de anteriores temporadas, en el RB10, el monoplaza con el que Red Bull aspira a conseguir su quinto título mundial consecutivo de F-1. El vigente campeón, Sebastian Vettel, y su nuevo compañero de equipo, el australiano Daniel Ricciardo, han sido los encargados de presentar este martes el nuevo coche en el circuito de Jerez, poco antes de comenzar la primera de las cuatro jornadas de ensayos de pretemporada.

El prototipo, de colores similares a los del RB9 y con motor Renault, es obra del ingeniero y director técnico Adrian Newey y tiene un morro más estrecho y redondeado, parecido al del bólido de la escudería hermana Toro Rosso. La nueva reglamentación para el 2014 obliga a bajar esta parte varios centímetros, por lo que la mayoría de los equipos, entre ellos McLaren, Lotus y Ferrari se han centrado en esta parte.

Tras conquistar el año pasado su cuarto título mundial consecutivo de F-1 tanto en el campeonato individual como en el de constructores, el equipo ha optado por la continuidad. "Si algo funciona, ¿para qué tocarlo?", ha declarado Newey. Donde sí ha habido cambios es el volante: Ricciardo, de 24 años, ha ocupado el lugar de Mark Webber tras competir las dos últimas temporadas con Toro Rosso.