La Asociación Enológica de Castellón, en su reunión mensual, abordó una temática diferente a lo habitual. Aceites, cervezas, tomata de penjar. Productos sencillos y comunes de la dieta mediterránea, que por habituales pasan muchas veces desapercibidos. El numeroso público asistente quedó cautivado con la calidad y singularidad de lo presentado y catado.
Juanma Vinuesa, técnico de comercio del Ayuntamiento de Alcalá de Xivert-Alcossebre, en representación de David Zayas elaborador de la cerveza artesana Latipica d’Alcossebre presentó esta singular cerveza. Aroma y sabor que evocan la Sierra d'Irta. Vinuesa anunció que en breve llegará al mercado, una cerveza que tendrá en su composición el tradicional tomate de este pueblo.
La segunda presentación de la noche corrió a cargo de José Joaquín Herrera, gerente de la firma Tomata de penjar Herrera, quien explicó las singularidades de este producto agrícola muy valorado enCataluña, insustituible en el tradicional pa amb tomaca. También es muy utilizada en las comunidades vecinas, ideal para sofrito, ensalada y en todas las preparaciones donde intervenga esta hortaliza. Es conocida como tomata de tot el any, un producto sostenible que no necesita aditivos, ni frío para su larga conservación. El clima y el alto contenido en sal del agua que se utiliza para el riego le confieren unas propiedades únicas que solo se obtiene en esta zona.
La tercera intervención fue a cargo del grupo de panaderos desPANcito”, tres maestros artesanos del pan, como máxima la elaboración de panes como antaño, panes sanos y naturales, como antiguamente y preparaciones más actuales. Óscar Sorribes, del forn San Basilio de Burriana; Antonio Garcia , de la panadería Blanch de Castellón y Carlos Morente, de pastes i pans de Benicarló, explicaron de forma amena y sencilla la elaboración de diferentes panes, harina de calidad, masa madre natural, agua y tiempo son los elementos principales de su exitosas preparaciones. Cinco tipos de pan diferentes: de algarroba con naranja, de espelta, de agua de mar con algas, de trittordeum e integral fueron catados por los asistentes.
La última intervención de la noche corrió a cargo del propietario de la finca Bardomus, Juan Carlos Barchi, explicó los orígenes de su empresa, ubicada en la Sierra d'Irta en un paraje de alto valor paisajístico. A continuación dio paso al Consultor Agroalimentario, olivicultor y catador de Aceites, Miguel Abad un apasionado de su oficio y un excelente comunicador que guió por el apasionante mundo de los Aove (Aceite de oliva virgen extra). Se pudo catar cuatro variedades, arbequina, borriolenca, canetera y picual, Abad explicó de forma muy amena y didáctica las diferencias, singularidades de cada una de ellas, aromas y sabores mediterráneos que sorprendieron a todos los asistentes.
