Muchas veces se asocia Instagram con los nativos digitales, aquellos que ya nacieron con un ordenador bajo el brazo. La creatividad, sin embargo, no tiene edad, como lo demuestra Kimiko Nishimoto, una japonesa de 89 años que es todo un fenómeno en la red tras viralizarse su colección de selfis realizados con un estilo de lo más peculiar.

Su obra abarca 17 años, pues no empezó en el arte de retratar hasta los 72, cuando su hijo organizaba un curso de fotografía para principiantes y ella, por su cuenta, decidió enrolarse por curiosidad. Entonces se despertó en Kimiko una pasión desconocida, que la ha llevado a desarrollar un estilo cómico y extravagante para retratarse a sí misma.

Su arte tiene mucho de cultura japonesa, tan radicalmente distinta de occidente, pero su positivismo es universal. Se basa en ponerse en situaciones extrañas que reflejan su gran sentido del humor: se mete en bolsas de basura, se viste de gorila o rana, simula hacer piruetas en una motocicleta... Incluso vuela o es atropellada en sus instantáneas, ya que además del encuadre domina la edición y la manipulación de imágenes.

CON ANDADOR / A pesar de su limitada movilidad, que la obliga a llevar andador y caminar con lentitud, Kimiko no duda en subirse a una escalera o tumbarse en el suelo para tomarse una autofoto. Después, y con ayuda de su hijo, cuelga sus obras en Facebook, donde cuenta con más de 6.500 seguidores. «Quiero hacer fotos muy divertidas y expresivas», afirma la artista cuando habla de sus futuros proyectos.

Su primera exhibición se celebró en el 2011 en Kumamoto, su ciudad natal en la isla de Kyushu. Ahora expone hasta el 18 de enero en la prestigiosa galería Epson, en Tokio. La muestra se titula Asobokane (Juguemos) y muestra el trabajo previo e inédito de la carismática octogenaria.

«La fotografía no miente, saca la realidad tal y como es. Por eso la disfruto mucho», explica Kimiko. Además de sus selfis y extravagantes retratos, la veterana artista también realiza fotografías macro de elementos de la naturaleza, como flores, animales y hojas, y elaboradas composiciones psicodélicas con luces y formas.