Angelina Jolie comienza el 2017 tratando de olvidar el 2016. La actriz quiere hacer borrón y cuenta nueva en un año en el que su divorcio con Brad Pitt seguirá dando que hablar.

La directora y protagonista de 'Frente al mar', de 41 años, ha decidido viajar de California, donde vive, hasta el estado deColorado para disfrutar de unos días en la nieve con sus seis hijos: Maddox (15), Pax (13), Zahara (11), Shiloh (10) y los mellizos Knox Leon y Vivienne, de 8 años.

ENCUENTRO CON BRAD PITT

La familia Jolie ha dado la bienvenida al nuevo año lejos de Los Ángeles y muy lejos de Brad Pitt. El actor no ha podido estar al lado de sus hijos en esta noche tan especial, aunque sí les vio en Navidad, días después de celebrar la Nochebuena y bajo la atenta mirada del terapeuta que supervisará todas sus visitas.

Según 'US Weekly', "Brad vio a los niños para un intercambio de regalos de vacaciones", y fue la propia Angelina la encargada de organizar este encuentro.

Ahora, pasados los días, la propia Jolie trata de dar una imagen de normalidad por el bien de sus pequeños. En las últimas imágenes, se la ha podido ver paseando por la calle al lado de sus hijos Knox Leon y Shiloh. Y es que, a pesar de las bajas temperaturas, los pequeños quisieron comerse un helado antes de entrar en una tienda de libros.

ESQUÍ CON SUS HIJOS

Angelina Jolie ha estado esquiando también, según desvela el 'Daily Mail', que ha publicado imágenes de la actriz y sus hijos. Según este medio, ha alquilado una mansión de lujo de seis dormitorios en Crested Butte, desde la que se puede acceder esquiando directamente a las pistas.

A pesar de su equipación deportiva, los testigos aseguran que Jolie ha tenido dificultades para mantenerse en pie en muchas ocasiones: "Parecía estar luchando en la montaña y se la veía caer de vez en cuando en las partes escarpadas de la pista, por lo que ha optado por quitarse los esquís y caminar de regreso".