La entrega de los Oscar ha quedado empañada por la sombra de la violencia de género, en concreto el Oscar al mejor actor masculino que recayó en Gary Oldman por su trabajo en El instante más oscuro. La que fuera su tercera esposa, Donya Fiorentino, ha recordado al portal TMZ las antiguas acusaciones contra el que fue su marido durante cuatro años. «Felicidades Gary y felicidades a la Academia por otorgar un Oscar no solo a uno, sino a dos maltratadores».

Efectivamente, la tercera esposa del actor británico le acusó en el año 2001, en pleno proceso de separación matrimonial, de golpearla con un teléfono delante de sus hijos. Aunque Fiorentino presentó su denuncia ante los tribunales de Los Ángeles, la policía nunca abrió una investigación en este caso.

LAS CRÍTICAS / «Creía que habíamos evolucionado. ¿Qué ha pasado con el #MeToo?», se pregunta Fiorentino en referencia al movimiento nacido en Hollywood contra el acoso sexual y aquellos que abusan de su posición de poder.

Según el hijo de Oldman, Gulliver Flynn, de 20 años, la sombra de estas acusaciones presentadas hace 17 años quiere amargar la merecida victoria de su padre. «Solo quiero proteger la figura de mi padre, como persona y como actor», ha escrito Gulliver nada más conocer la reacción de Fiorentino. «En un momento como este en su carrera, mi padre debería ser capaz de disfrutarlo. Confío en que sea así», ha añadido el joven, que acudió junto con su hermano, Charlie John, y la actual esposa de Oldman, Gisele Schmidt, a la ceremonia.

«Ha sido perturbador y doloroso ver que estas falsas acusaciones contra mi padre se escriben nuevamente, especialmente después de que todo esto se resolviera hace años», afirma el joven, en referencia a que el caso fue investigado por la policía en 2001, aunque nunca se presentaron cargos.

En su día Fiorentino también acusó al que fue su marido de gastarse miles de dólares en alcohol, drogas y prostitutas en hoteles de Nueva York. El actor, productor, guionista y realizador, también conocido por su trabajo no solo en cine o en teatro sino en populares vídeo juegos como Call of Duty, ha reconocido públicamente en repetidas ocasiones sus problemas con la bebida. Sobrio desde hace años, Oldman agradece a la organización Alcohólicos Anónimos su recuperación.

EL SEGUNDO, KOBE BRYANT / En sus declaraciones al portal TMZ, Fiorentino no da el nombre del segundo maltratador galardonado con el Oscar. Pero tanto la prensa como las redes sociales apuntan a Kobe Bryant, la estrella de la NBA, que recibió una estatuilla al mejor cortometraje animado por Dear Basketball, un repaso a su carrera en el baloncesto.

Bryant fue acusado de violar a una mujer en el 2003, un caso que llegó a los tribunales pero del que nunca fue juzgado porque la supuesta víctima no cooperó con la investigación. Con los años, Bryant reconoció su promiscuidad aunque siguió rechazando las acusaciones de violación.

Supuestamente el caso concluyó cuando la víctima recibió cinco millones de dólares por su silencio, algo que Bryant siempre ha negado.